Lluvia de millones para la cúpula de Prisa mientras la compañía diseña la salida de más de 2.500 trabajadores. El despacho de Matías Cortíés, consejero de la casa, se embolsó la friolera de 22,11 millones en 2010 por asesorar operaciones como la entrada de Liberty Acquisition Holdings Corp en el capital del grupo. Y esto es sólo la punta del iceberg. La remuneración de los consejeros se elevó hasta los 9,8 millones de euros y la de los directivos se fue a 7,1 millones, un 25% más que el año anterior. Todo mientras la deuda de la empresa, pese a las desinversiones acometidas, supera los 3.200 millones.
Según los resultados de la compañía presentados ayer, Cortíés ha llenado la mayor parte de su hucha en el segundo semestre del año, meses en los que Prisa cerró la operación con las firmas y hedge funds de Liberty. Sólo en esas 24 semanas habría ingresado 15,2 millones, despuíés de que su bufete ya facturara a los Polanco 6,9 millones en la primera parte del año. Nada nuevo bajo el sol. Cortes Abogados se había apuntado más de ocho millones de euros en 2009, duplicando los 4,3 millones de 2008. En los tres últimos años ha obtenido 34,4 millones por “servicios de asesoramiento jurídico y dirección letrada (…) y asesoramiento jurídico-consultivo en varios asuntos prestados a Prisa y a Prisa Televisiónâ€.
Los 22,1 millones abonados este año al cerebro legal de Prisa suponen casi una cuarta de parte de los 95 millones del cash de Liberty que la compañía ha reservado para el ajuste de plantilla. Además, su hermano Luis Cortíés Domínguez tambiíén ha sacado tajada. Ingresó durante el año un total de 80.000 euros por “servicios prestados a Diario As†en diversos pleitos. Tambiíén realizaron trabajos para Prisa el consejero Gregorio Marañón y Bertrán de Lis, que añadió a su retribución 200.000 euros por “asesoramiento jurídico a Prisa Televisión†y Alain Minc, nuevo en el cónclave, que percibió 150.000 euros por “asesoramiento estratíégicoâ€.
Los 9,8 millones que se pagaron a los consejeros suponen una rebaja en sus emolumentos, desde los 13,7 del año anterior. Sin embargo, esos casi diez millones que se reparte la cúpula de Prisa duplica la remuneración de los consejeros de Telecinco, Antena 3 o Vocento, que se mueven en cada caso entre los cuatro y cinco millones de salario. Como ya sucedía en 2009, el Consejo de Administración de Prisa es el mejor pagado del sector. Cinco consejeros -entre ellos el consejero delegado, Juan Luis Cebrián, y los hermanos Ignacio y Manuel Polanco- acaparaban entonces el 85% de la retribución otorgada al máximo órgano de representación.
Generosidad con la ‘cupula’ directiva
En el caso de los directivos, la remuneración de 7,1 millones supone un alza del 25% respecto a los 5,3 millones del año anterior. La compañía había anunciado para 2009 un importante recorte en la política de retribuciones en los directivos, en línea con las dificultades del grupo y con el proceso de desinversiones exigido por la banca para satisfacer una deuda que rozaba los 5.000 millones de euros. El ajuste se tradujo en una reducción del 8% en la retribución fija del personal directivo.
La generosidad salarial contrasta con la hoja de ruta que marcará el futuro de los profesionales de Prisa en los próximos meses. El denominado Plan de Eficiencia Operativa contempla la rescisión del contrato de 2.514 empleados entre 2011 y 2012. El grueso de las bajas se producirá este año: dejarán la compañía 2.184 trabajadores, 1.240 de la división audiovisual y 505 de la radio. Paradójicamente, las cuentas de este año ya contemplan una importante salida de profesionales. Prisa contaba al cierre de 2009 con 14.987 trabajadores en nómina; la cifra se quedaba en 13.885 a 31 de diciembre de 2010.
La empresa no cuantifica el impacto económico del recorte en la plantilla, que deja a expensas “del resultado de la negociación con los representantes laboralesâ€. í‰stos vienen subrayando la dificultad que tienen Cebrián&Co. para justificar ante Trabajo un macroexpediente de regulación de empleo cuando todas las divisiones del grupo ganan dinero. En efecto, la división Audiovisual tuvo el año pasado un beneficio antes de impuestos de 308,7 millones; la de Educación/Editorial, de 166,3; la Radio obtuvo un saldo positivo de 108 millones, y la Prensa logró 56,4. Un ejemplo último de la buena salud del negocio es El País, único de los grandes diarios que gana dinero. Registró un ebitda de 38,5 millones y un beneficio neto de 19,20.
Por eso sorprendió sobremanera que la sociedad arrojara un resultado neto negativo de 72,87 millones en el conjunto del ejercicio. Mucho tuvo que ver el resultado de operaciones en discontinuación -veáse los ingresos ajustados al fondo de comercio en la venta de Cuatro-, pero, sobre todo, la provisión de 80 millones para la “reestructuración en empresas asociadasâ€. Según un analista consultado por este diario, “tíécnicamente se han tomado medidas de contabilidad prudente. No hay nada que objetar. Claro que es más difícil presentar un ERE si no estás perdiendo dineroâ€. El temor entre los sindicatos es que Prisa se apoye en las píérdidas del grupo para plantear una regulación de empleo para el conjunto de la sociedad y no empresa por empresa, donde ven más fácil plantear batalla.