La sangría de la crisis sigue azotando al tejido empresarial español. Si atendemos a las compañías inscritas en la Seguridad Social, en febrero había 1,23 millones, 28.047 menos que en el mismo mes de 2010. Habría que remontarse a 2003 para encontrar un dato más bajo a estas alturas del año. Los datos indican que desde el inicio de la crisis han desaparecido casi 200.000 compañías.
La situación económica que atraviesa el país se está haciendo insostenible para muchas empresas, especialmente para las más pequeñas. Eso es al menos lo que se desprende de los datos del Ministerio de Trabajo, que publica mensualmente el número de compañías registradas a la Seguridad Social.
En febrero de este año eran exactamente 1.229.963. Un número que se antoja alto, pero que sin embargo solo en 2003 ha sido más escaso a las mismas alturas del año. El pico histórico en el censo de sociedades se registró en 2008. Desde entonces han desaparecido casi 200.000 compañías.
En este sentido, conviene destacar que los últimos datos reflejan que el ritmo de la desaparición de empresas se ha suavizado. Aunque las 28.047 perdidas entre febrero de 2010 y 2011 siguen siendo demasiadas, la cifra se suaviza comparándola con las 55.000 empresas borradas entre 2009 y 2010 o las 88.000 de 2008 a 2009.
Los datos revelan tambiíén que las más proclives a desaparecer son las pequeñas. Así, de las empresas que han abandonado el registro de la Seguridad Social en los últimos 12 meses, el 81,8% tenían menos de diez empleados y el 98,2% no llegaban a los 50. De hecho, el único segmento de compañías que sí ha aumentado es el de las que cuentan con una plantilla superior al millar (se han registrado nueve más que en 2010). Por sectores, el más perjudicado ha sido el de la construcción, que contabiliza hasta 14.914 sociedades menos que en febrero del año pasado. Le siguen el sector servicios (-8.266 empresas) y el industrial (-4.931). La agricultura, en cambio, ha sido capaz de alumbrar 64 empresas en los últimos 12 meses.
Y si la destrucción de empresas ha sido notoria, es bien sabido que la de empleo tampoco ha sido menor. De hecho, el paro ya es la primera preocupación del 83,9% de los españoles, según el barómetro de febrero del Centro de Investigaciones Sociológicas publicado ayer. El impacto de la destrucción de estas más de 28.000 empresas en los empleados dados de alta en la Seguridad Social ha sido igualmente irregular. Así, la construcción concentró el grueso de la reducción de plantilla de las compañías (114.929), seguido del sector industrial (60.697), el servicios (39.873) y agricultura (3.230).
Pese a que las empresas de más de 50 empleados que han desaparecido del registro suponen solo un 1,8% del total, son responsables del 23,7% de la caída de personal de las compañías españolas.
Cataluña, la autonomía donde más empresas abandonan el registro
Es donde menos empresas hay inscritas en la Seguridad Social, pero tambiíén donde menos se han borrado del registro. Entre febrero de 2010 y de 2011 han desaparecido 140 compañías en La Rioja, hasta quedarse en poco más de 10.000.
De la misma manera, la comunidad autónoma que más empresas ha perdido es la que más tiene registradas: Cataluña. Concretamente han sido 5.742, hasta quedarse en 225.670.
Le siguen Andalucía, que se queda con algo más de 196.555 empresas tras perder 4.000; Madrid, donde hay inscritas 179.430 (pierde 3.371); y la Comunidad Valenciana, que junta 136.215 compañías despuíés de haber eliminado del registro algo más de 4.000 empresas.
Las sociedades anónimas, mejor que las de responsabilidad limitada
En los últimos 12 meses hay 4.149 sociedades anónimas menos en los registros de la Seguridad Social. El golpe ha sido más fuerte entre las sociedades de responsabilidad limitada, que cuentan 14.769 menos que hace ahora un año.
Con todo, el número de sociedades anónimas lleva decreciendo año tras año desde 1997, el primer año del que tiene datos Trabajo. Así, ha pasado de 105.000 en febrero de 2001 a las 70.750 registradas este año.
Las sociedades de responsabilidad limitada, en cambio, han seguido desde 1997 una trayectoria ascendente interrumpida en 2008, el primer año de la actual crisis. Ahora hay 558.000, mientras que el máximo histórico, alcanzado el mismo 2008, fue de 642.000.
La cifra
83,9% es la proporción de ciudadanos que identifican el paro como su principal preocupación, según revela el barómetro de febrero del CIS. El dato es un punto y medio más alto que en enero.