La inflación aumentó en febrero en EEUU a su mayor ritmo en más de año y medio, un 0,5 por ciento, lo que situó la tasa interanual en el 2,1 por ciento, sobre todo por los precios de la energía.
El índice de precios al consumo (IPC) se situó una díécima por encima de lo previsto por los analistas. Según las estadísticas publicadas por el Departamento de Trabajo, la inflación subyacente, que excluye la variación de los precios de los alimentos frescos y la energía, aumentó un 0,2 por ciento por segundo mes consecutivo, como esperaban los expertos.
Eso da a la Reserva Federal (Fed, banco central) todavía margen para mantener su política monetaria generosa. No obstante, la inflación subyacente para los últimos doce meses se situó en el 1,1 por ciento, lo que supone casi duplicar el 0,6 por ciento de octubre pasado.
El martes la Fed informó de que observaba una recuperación económica “más asentada†y una inflación “estable†en EEUU, por lo que mantuvo los tipos a un nivel “excepcionalmente bajoâ€, entre el 0 y el 0,25 por ciento, por un “periodo prolongadoâ€.
El índice general registró en casi todas las categorías grandes aumentos, aunque la fuerte subida de los precios de la energía -debido a las revueltas en países árabes- fue la que más contribuyó a la carestía de la vida de los estadounidenses. Los precios de la ropa fueron de los pocos que bajaron, un 0,9 por ciento.
El precio de los alimentos subió un 0,6 por ciento en febrero, despuíés de hacerlo un 0,5 por ciento en enero. En tíérminos interanuales, la subida del 2,3 por ciento de los alimentos representa la subida más pronunciada desde mayo de 2009.
Mientras, los precios de la energía aumentaron un 3,4 por ciento, la mayor cifra desde diciembre. En los últimos tres meses, ha subido un 9,8 por ciento. La gasolina siguió subiendo y aumentó el 4,7 por ciento en febrero y un 19,2 por ciento en los últimos doce meses. En tíérminos interanuales, el incremento del 11 por ciento en los precios de la energía es el mayor registrado desde mayo de 2010.
La Fed destacó tras su segunda reunión del año del Comitíé de Mercado Abierto la “subida significativa†de los precios de las materias primas los últimos meses -el crudo ha sobrepasado la barrera de los 100 dólares por barril-, aunque subrayó que “las expectativas de inflación a largo plazo han permanecido establesâ€. Estimó que los efectos de este incremento sobre la inflación serán “transitoriosâ€. La inflación no ha sido el único dato macroeconómico que se publicó en EEUU.
El Departamento de Trabajo indicó que la cifra semanal de solicitudes de subsidio por desempleo bajó en 16.000 y se situó en 385.000, en línea con lo previsto por los analistas. En las últimas cuatro semanas, un indicador menos volátil, el promedio de las peticiones disminuyó en 7.000, hasta situarlas en 386.250, el nivel más bajo desde julio de 2008.
En la semana que terminó el 26 de febrero, según las cifras del Departamento de Trabajo, había 8,9 millones de personas que percibían algún subsidio por desempleo en EEUU. Durante la peor parte de la recesión (2007-2009), la mayor economía del mundo perdió más de 8,2 millones de puestos de trabajo. La tasa de desempleo se situó en el 8,9 por ciento en febrero.
Por último, la producción industrial en EEUU bajó inesperadamente un 0,1 por ciento en febrero, despuíés de haber aumentado un 0,3 por ciento el mes anterior, una caída no prevista por los analistas.