El Tesoro Público prevíé colocar este martes entre 1.500 y 2.500 millones de euros en letras a tres y seis meses, tras el íéxito de las subastas de la pasada en semana, en las que adjudicó 9.630 millones de euros con una rentabilidad más baja.
Esta emisión volverá a ser una prueba de fuego para la deuda española, ya que, aunque la resaca de la decisión de Moody's de rebajar la calificación a España parece haberse diluído, aún está pendiente el posible rescate de Portugal, más aún cuando el país luso logró colocar 1.000 millones de euros la pasada semana, pero con mayor rentabilidad y menos demanda.
La última emisión de letras a tres y seis meses tuvo lugar el pasado 22 de febrero con un resultado dispar. Así, en el caso de los papeles a tres meses, el Tesoro emitió 1.859,47 millones de euros, con un tipo marginal del 1,120%, ligeramente superior al 0,995% de la subasta anterior. En el caso de las letras a seis meses, el Estado logró colocar 1.011 millones de euros, pero con una rentabilidad que bajó del 1,820% al 1,600%.
En ambos casos, la demanda por parte de los inversores fue amplia. í‰sta es la principal preocupación del Ministerio de Economía y Hacienda, para el que ese íéste y no la rentabilidad, es el verdadero baremo del interíés que la deuda española despierta en los mercados.