El presidente de EE.UU., Barack Obama, reiteró ayer su compromiso para reducir la dependencia petrolera a travíés de "la inversión en energías limpias y una mayor eficiencia", con el objetivo de garantizar la "seguridad energíética" del país.
Subrayó, además, su intención de "reducir en un tercio las importaciones petroleras para 2025", que en la actualidad son de 11 millones de barriles al día.
Obama, durante su discurso radiofónico semanal, indicó que esta cifra es "una meta alcanzable".
El presidente de EE.UU. recordó que el país consume cerca de 25% de la producción mundial de crudo, mientras que sólo posee cerca de 2% de las reservas globales.
"Nuestra seguridad energíética sólo podrá ser alcanzada si encontramos modos de utilizar menos petróleo, e invertimos en combustibles más limpios y en una mayor eficiencia energíética", agregó.
Entre las nuevas tecnologías que se mostró decidido a impulsar, Obama citó los biocombustibles, el gas natural y las baterías avanzadas.
De este modo, dijo, harán que su economía "sea menos vulnerable a las fuertes oscilaciones en los precios del petróleo".
Asimismo, Obama remarcó que el Gobierno federal ha duplicado el número de vehículos que utilizan energía limpia dentro de la flota pública y destacó que grandes compañías como FedEx, UPS o PepsiCo cambian tambiíén sus automóviles y camiones por otros más eficaces.
Anteayer, el presidente visitó un suburbio en Maryland y recorrió una central de carga de la empresa UPS, en la que examinó todos los vehículos elíéctricos e híbridos que íésta utiliza, al igual que otras compañías como AT&T, Verizon y PepsiCo.