La Agencia de Seguridad Nuclear de Japón ha detectado altos niveles de radiactividad en el interior de los reactores uno y tres de la central de Fukushima-1, donde se ha desatado una emergencia nuclear como consecuencia del terremoto y el tsunami del pasado 11 de marzo. Estos datos han sido recabados por dos robots estadounidenses dirigidos por control remoto que han entrado en los edificios de ambos reactores para actualizar las cifras de radiactividad, hidrógeno, temperatura y humedad.