A priori, la semana debería comenzar con un aire optimista despuíés del buen dato de paro en EEUU conocido el viernes y del desplome de las materias primas, que afloja un poco la presión sobre el gasto de consumo y la inflación. Ambas cosas deberían mantener el optimismo de los inversores y, en consecuencia, la subida de las bolsas.
Sin embargo, este fin de semana las cosas se han torcido con el nuevo agravamiento de la crisis griega. Aparte de los rumores del viernes sobre su posible salida del euro, este fin de semana varias reuniones al más alto nivel han puesto de manifiesto la insuficiencia del rescate concedido hasta ahora y la necesidad de ampliarlo... o de aceptar una quita por parte de los acreedores del país heleno.
Algo que no se puede decir que no fuera esperado, pero que probablemente provocará otro ataque a la deuda pública de los países perifíéricos y provocará recortes en las bolsas. Eso sí, estos episodios cada vez han sido más suaves y menos duraderos desde el inicio de la crisis soberana hace más de un año; veremos si esa tendencia se mantiene ahora.
Estos serán los dos grandes temas de la semana en los mercados, junto a algunos datos sobre la salud del consumo en EEUU. La temporada de resultados prácticamente ha concluido salvo alguna tecnológica como Cisco.
Hoy lunes no tendremos dato económicos de relevancia y la única empresa que da resultados es Tyson Foods. Mañana martes conoceremos las cuentas de Disney y los precios de importación y exportación, así como los inventarios mayoristas. El miíércoles será el día de Macy's y Cisco, junto al díéficit comercial de EEUU.
El jueves tendremos los precios industriales, las demandas semanales de desempleo y el dato estrella de la semana, las ventas minoristas de abril, para las que se espera una subida del 0,6%. Darán resultados Kohl's, Nordstrom y Nvidia. Finalmente, el viernes se publicará el IPC, con una previsión de subida del 0,4%, junto al índice de la Universidad de Michigan de sentimiento del consumidor.