Luís del Rivero, presidente de Sacyr Vallehermoso, se mostró ayer muy optimista sobre la refinanciación del críédito sindicado de casi 5.000 millones de euros que pidió en 2006 para comprar el 20% de Repsol. Sin embargo, dejó caer que varios bancos le cortarán el grifo. Según indican fuentes financieras, entre ellos están Royal Bank of Scotland (RBS) y Citi, que tienen participaciones de unos 500 millones.
Fuentes del mercado aseguran que no son los únicos que están poniendo reparos en las primeras conversaciones que han mantenido con los directivos de Sacyr. Las mismas explican que la estrategia desde las centrales de Londres es reducir la exposición a España en lugar de prolongarla, especialmente aquellos que han financiado a constructoras e inmobiliarias.
El papel de Citi es muy relevante, puesto que fue uno de los cuatro que lideró el príéstamo sindicado junto a Banco Santander, Caja Madrid y Calyon. Por tanto, uno de los que más aportó a la financiación, participaciones que son conocidas como tickets. En el mercado tambiíén se duda de que el banco francíés prorrogue su presencia en el críédito, si bien su postura no ha podido ser contrastada.
Citi no ha querido hacer comentarios sobre esta información, igual que RBS. Sin embargo, ambos fueron citados de forma indirecta por el propio Del Rivero en la rueda de prensa previa a la Junta General de Accionistas. El empresario murciano admitió que no todos le refinanciarían porque “en estos cinco años, algunos han tenido problemas y han sido intervenidosâ€. Una aseveración en clara referencia al banco estadounidense, del que el Tesoro americano ha llegado a tener el 27% tras inyectarle más de 45.000 millones de dólares, y el británico, cuyo 65% del capital está en manos del Estado.
Sin embargo, Del Rivero añadió que “otros han mejorado y han tenido un fuerte desarrollo", por lo que aventuró que no habrá ningún problema en extender el críédito al menos un año más. “Hay muchos bancos ansiosos de entrar en el críéditoâ€, dijo el presidente de Sacyr, que ya ha recibido muestras de interíés de varias instituciones europeas. Una de ellas es Sociíétíé Gíéníérale, uno de los bancos que mejor ha salido de la crisis pese al agujero que le generó la operativa del broker Jerome Kerviel.
El grupo francíés mantiene una excelente relación con Del Rivero, así como con otras constructoras, como ACS. Al holding liderado por Florentino Píérez le concedió una línea de críédito de 300 millones de euros para financiar las últimas adquisiciones de Iberdrola. Además, ha participado en los últimos grandes príéstamos, como el otorgado a CVC para comprar el 15% de Abertis con 1.500 millones de deuda bancaria.
Fuentes de varios bancos internacionales aseguran que refinanciar a Sacyr “es un buen negocio†porque el tipo de interíés del príéstamo inicial era muy bajo respecto a lo que se cobra ahora por abrir el grifo. “Se puede cobrar más del doble por la escasez de liquidezâ€, indican desde una institución extranjera. “El problema sería entonces para Sacyr porque entonces los dividendos de Repsol no serán suficientes para pagar los interesesâ€, argumenta un experto del sector.
Confusión de tíérminos
En su comparecencia de ayer, Del Rivero cometió un error al decir que con la retribución que recibe de la petrolera paga la deuda asociada a la inversión. En realidad, el dividendo de Repsol lo que cubre son los intereses del príéstamo, puesto que la constructora adeuda todavía cerca de 4.974 millones de los 5.118 que pidió en su momento. En los tres últimos años, Sacyr solo ha amortizado 188 millones de forma anticipada del principal.
“Sacyr no podrá devolver el principal del críédito en muchísimos años. Es literal y financieramente imposible si no vende su participaciónâ€, argumentan desde un banco nacional. “No genera la caja suficiente ni la generará. Por eso muchos bancos quieren salirse o canjear su ticket por las acciones.
Del Rivero confía en que Santander, la entidad con más exposición, se quede con los paquetes que no quieran refinanciar bancos como RBS y Citi. Tambiíén dijo ayer que espera la entrada de grupos financieros de Brasil y China. "Lo verdaderamente importante es tener el 20% de la primera compañía energíética españolaâ€, insistió el presidente de la constructora.