“Vocento podría ser objetivo del mercado de fusiones y adquisiciones una vez concluya el acuerdo de sindicación de sus accionistas, en septiembre de este añoâ€. Así de contundente se mostraba ayer el servicio de análisis JB Capital Markets, un día despuíés de que El Confidencial publicara que buena parte de los accionistas del grupo aboga por acometer una revolución en la cúpula de la sociedad con la salida del presidente y del consejero delegado. “Un cambio de timón en la compañía podría alentar una vez más los rumores de que hay una operación en marcha, y relanzar el precio de la acciónâ€, añade la firma de Javier Botín.
Las principales familias propietarias de Vocento dejaban a un lado sus diferencias y suscribían en 2006 una suerte de blindaje para “dar estabilidad al accionariado†en plena salida a bolsa. Los Ybarra, Bergareche, Urrutia y hasta un 43,6% del capital se comprometían, en el caso de una oferta por la sociedad y durante un período de cinco años, a “no transmitir, directa o indirectamente, las acciones de su titularidad (…) en el marco de la OPAâ€. Una venta que sólo podría realizarse si una mayoría simple aceptara la transacción, caso para el que tambiíén se contemplaban fórmulas de adquisición preferente.
El quinquenio cumple despuíés del verano, con la cotización cinco veces por debajo de su primer día en el parquíé, en que cerró a 15,6 euros. De una capitalización de 2.000 millones a una de apenas 420. La editora de ABC cerró ayer en 3,38 euros por acción, tras ceder casi un 7% en uno de los días con mayor movimiento de títulos en el ejercicio. Una evolución que provoca inquietud entre los consejeros, que han visto considerablemente reducido su patrimonio en apenas cinco años.
“El pobre comportamiento de la acción desde la OPV, la naturaleza fragmentada de la base de accionistas, así como el valor de los activos de la compañía, que pueden consolidarse vía transacción con otros operadores, pueden actuar como catalizadores sobre la cotizaciónâ€, expone el análisis, que recuerda que el precio de los títulos sitúa a Vocento “cerca de su valor en libros y no da ninguna credibilidad a los planes de reestructuración ya llevados a caboâ€. En ese escenario, JB Capital Markets considera que la cotización ha tocado suelo y sitúa su precio objetivo en 4,6 euros con la expectativa de que pueda producirse una operación corporativa.
Este periódico anticipó ayer que el grupo de medios vive una situación explosiva en su Consejo de Administración. Un frente que aglutina a pesos pesados del accionariado como Soledad ‘Petisa’ Luca de Tena, Víctor Urrutia y Josíé Bergareche estaría por la labor de forzar la salida del actual presidente, Diego del Alcázar, a quien reprochan su falta de control sobre el consejero delegado, entre otras críticas. Tampoco salva la cara el primer ejecutivo de la firma, Josíé Manuel Vargas, en el punto de mira tras el fichaje por Prisa de su número dos, Josíé Luis Sainz, que no tenía cláusula alguna para limitar su salida a la competencia. Los números de la compañía en los últimos ejercicios tampoco le ayudan.
Desbloquear el futuro del grupo
El Consejo de Vocento debate desde hace meses el futuro del grupo, actualmente en clara situación de impasse. Unos sostienen que es necesario buscar un socio gestor que asuma parte de la deuda de ABC, principal lastre financiero de la compañía. Tambiíén que es imprescindible cerrar los negocios que no son rentables, como el Quíé! o Punto Radio. Otros van al fondo del problema y abogan directamente por una profesionalización de la gestión. Y los menos aún confían en el plan estratíégico diseñado para ABC, en virtud del cual las cuentas se equilibrarían el año próximo, y en esperar a que la publicidad ayude a poner en números negros el resto de cabeceras.
El consejero delegado ha insistido en que el futuro pasa por la digitalización, con el proyecto Kiosko y más, una plataforma de pago para el iPad, como apuesta más inminente. La compañía ofreció su visión al mercado en una conferencia con analistas celebrada hace una semana. La dirección explicó entonces que mantenía una importante ventaja competitiva respecto a sus socios por su reducido nivel de deuda financiera –aunque se sitúa ya en 125 millones de euros- cara a la consolidación del sector. De hecho, Vocento dejó claro que el número de jugadores era excesivo, claramente en prensa pero tambiíén en televisión y radio. La debacle publicitaria que sufren los medios de comunicación podría estimular ese proceso.