Los ingresos de las administraciones caen un 1,3% hasta abril si se excluye el impacto de las subidas fiscales. Las figuras que más retroceden: Sociedades y Especiales.
La tocada recaudación de las administraciones públicas muestra las graves dificultades a las que vuelve a enfrentarse la economía española despuíés de más de tres años de crisis. A pesar del leve paríéntesis registrado a finales del año pasado, las principales figuras tributarias vuelven a mostrar la debilidad de la actividad hasta abril, según las últimas cifras oficiales.
Todo apunta a que, como sugiere el informe anual del Banco de España, el Gobierno se verá abocado a recurrir de nuevo al parche de las subidas de impuestos.
La secretaría de Estado de Hacienda, que estará controlada a partir de ahora por Josíé Manuel López Carbajo, vende que los ingresos crecen un 4,2% en los primero cuatro meses del año. Ahora bien, si se excluyen las subidas de impuestos impulsadas por el Ejecutivo en los últimos meses, la recaudación estaría cayendo a un ritmo del 1,3%, lo que pone de manifiesto que el PIB sigue sin remontar.
El legado que deja Carlos Ocaña a su sucesor en el Ministerio de Economía pone en jaque el objetivo de reducción del díéficit al que se aferra la vicepresidenta económica, Elena Salgado. El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, ya destacó despuíés de la victoria electoral del 22-M que, más que las finanzas regionales, lo que verdaderamente le preocupa es la situación de los ingresos tributarios. Ninguna de los grandes impuestos muestran síntomas de fortaleza
Impuesto de Sociedades. La recaudación de este tributo sigue desplomándose hasta abril a un ritmo del 14,5%, lo que muestra la grave situación que viven las compañías nacionales. Los expertos tambiíén indican que hace falta una reforma en profundidad de esta figura, que no ha parado de desplomarse desde que comenzó la crisis fiscal.
Impuestos Especiales. La recaudación total de estas figuras cae hasta abril un 4,6%, poniendo de manifiesto que el consumo y la demanda interna siguen sin tirar, y echando por tierra el impacto de las subidas de impuestos aprobadas por el Ejecutivo. Según el último informe de recaudación elaborado por el Fisco, los ingresos del impuesto que grava el alcohol caen un 0,2%; el de la cerveza un 3%; el de hidrocarburos un 4,3%, y el de las labores del tabaco un 6,9%. Las subidas de tipos aprobadas en los últimos meses en estos impuestos indirectos, entre la que destaca la del tabaco, sólo han aportado hasta abril una recaudación extra de 245 millones de euros.
Impuesto del Valor Añadido (IVA). El Gobierno se ha aferrado a este impuesto como una muestra de la fortaleza de la actividad. Sin embargo, la subida de la recaudación del 12% en los primeros cuatro meses del año sólo se sustenta gracias a la subida de tipos que entró en vigor en julio del año pasado, y que dejará de notarse a mediados de años. Si se excluye el impacto de este alza fiscal (que ha castigado el consumo cebándose especialmente con colectivos como los pensionistas y los mileuristas), la recaudación del IVA seguiría estancada.
Sólo con los datos del Estado encima de la mesa, se observa que cada vez hay más obligaciones pendientes de cobro (impagos), lo que genera problema de liquidez en el largo plazo.
Impuesto de la Renta (IRPF). La subida de la recaudación del Impuesto de la Renta del 2,7% tambiíén se sustenta en gran medida por las subidas fiscales aprobadas por Zapatero. Si no fuera por la eliminación de la deducción de 400 euros, la promesa electoral estrella de Zapatero, por la supresión de la ayuda por maternidad y por la subida del IRPFa las rentas altas, los ingresos de esta figura tambiíén seguiría estancada.
Hasta la fecha, las previsiones de ingresos que se planteaban en los Presupuestos de 2011 no se están cumpliendo, lo que obligará a impulsar un nuevos ajustes, aunque lo niegue Salgado. Pero tambiíén rechazó que fuera a impulsar un recortazo en mayo de 2010 como el que se produjo.
Y mientras... los gastos corrientes siguen disparados
El Gobierno insiste en que cumplirá escrupulosamente con el objetivo del díéficit, a pesar de que los datos que se conocen hasta la fecha no invitan al optimismo. Los ingresos no tiran... pero los gastos tampoco comienzan a menguar, a pesar del recorte del sueldo de los empleados públicos y de las promesas de austeridad. Según los últimos datos de ejecución presupuestaria de las regiones, el gasto de las CCAA avanzaba en el primer trimestre a un ritmo del 5%.
Pero las diecisiete autonomías no son las únicas incumplidoras. Algunas partidas de gasto del Gobierno, las que controla directamente, siguen subiendo. Según datos del Ministerio de Hacienda, los gastos de personal, comparando las cifras que computarán realmente en díéficit de 2011, crecen un 1,4% hasta abril. Los gastos corrientes se disparan un 14,7%.
4 ó 5 reuniones
La comision interna encargada de resolver el concurso del Consejo del Autónomo se reunió “tres o cuatro veces en dos mesesâ€, según su presidente, Jose Luis Monzón.
Tambiíén explica que “entre reunión y reunión†–que otras voces apuntan a que fueron sólo dos– “íbamos valorando†la documentación entregada. Esto es, más de 50.000 folios que fueron entregados a finales del mes de abril.
