El primer ministro griego, Giorgos Papandreou, estimó que era "hora de que Europa se despierte" y encuentre una solución viable a la crisis de la deuda griega, que amenaza con minar la zona euro, en una entrevista que se publicará el domingo.
Papandreou aseguró que Grecia no declarará una suspensión de pagos de su deuda y que las discusiones actuales se encaminan hacia una solución "a largo plazo" de esta crisis, según un adelanto de la entrevista publicado por el diario Kathimerini.
"En esta etapa, no hay sitio para voces que cultivan el miedo y apuestan por el fracaso" de las negociaciones entre dirigentes europeos, agregó el primer ministro.
Los dirigentes europeos se reunirán el 21 de julio en Bruselas para una cumbre extraordinaria en busca de una solución viable que aligere la deuda griega, la cual suma 350.000 millones de euros.
Esta cumbre se celebrará bajo la presión de los mercados y la amenaza de que la crisis de la deuda griega se propague a otros países como Italia, lo cual pondría en peligro la cohesión de la zona euro.
El semanario alemán Der Spiegel informa en su edición del lunes que el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schí¤uble, estima que Grecia podría reducir su deuda en 20.000 millones de euros si comprara ella misma sus propias obligaciones.
La operación podría financiarse, según Der Spiegel, mediante un príéstamo del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF), creado el año pasado de forma provisional (tres años) para ayudar a los países en dificultades de la zona euro.
En otra entrevista que publicará el domingo el diario griego To Vima, el italiano Lorenzo Bini Smaghi, miembro del directorio del Banco Central Europeo (BCE), declaró que podría modificarse el papel del FEEF para permitir la compra de obligaciones griegas en el mercado secundario.
Esto podría ayudar a aliviar la deuda griega y permitiría implicar al sector privado en estas operaciones, estimó Bini Smaghi, quien cree que la alternativa de una emisión de obligaciones europeas no está exenta de dificultad.