04/06/2008
El ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, desveló hoy que el recibo de la luz subirá entre un 5% y un 6% de media a partir del próximo 1 de julio.
Durante su comparecencia en el Congreso de los Diputados ante la Comisión de Industria, Turismo y Comercio, Sebastián dijo que el incremento de las tarifas estará en el "entorno del IPC", aunque habrá "alguna diferencia en función del grado de vulnerabilidad de los consumidores y su capacidad de ahorro".
Esta cifra es sensiblemente inferior a la que proponía la Comisión Nacional de la Energía (CNE), que consideraba que la nueva tarifa debería subir cerca de un 11% para hacer frente al díéficit de tarifa.
El ministro se refirió tambiíén al díéficit de tarifa, que calificó de "entelequia", y reiteró que el Gobierno le va a poner fin de forma "razonada y razonable", porque "no beneficia a nadie".
Sebastián comentó que en este proceso se realizará con "el menor impacto posible para los consumidores", aunque defendió que tener "más acceso a potencia vale más, y que para dos consumidores con la misma potencia, quien consume más, paga más".
El titular de Industria quiso dejar claro además que "el Gobierno no va a dejar desprotegidas a las empresas en el nuevo marco regulador".
En el turno de ríéplica el ministro dio más detalles del Plan Contador que se pondrá en marcha para acelerar la sustitución del antiguo parque de contadores.
En este plan se contempla que los consumidores que lo deseen puedan probar durante tres meses los nuevos contadores de la luz, que supondrán un ahorro de alrededor el 8%, para que comprueben si les resulta "ventajoso". El usuario tendrá en nuevo contador instalado en un plazo máximo de tres meses desde que se solicite.
Críticas de la oposición
Desde el PP, el diputado Antonio Erias criticó que se anuncien "muchos planes" pero no se digan ni sus plazos de ejecución ni su materialización económica. Además, Erias señaló que algunos de los planes anunciados "llegan tarde".
Pos parte de CiU, Josep Sánchez Llibre pidió al ministro medidas frente al "díéficit en la internacionalización" de las empresas, la "deficiente política energíética" y la "incapacidad de trasladar" la I+D+i a los sectores productivos.
Desde el PNV, Pedro Azpiazu pidió que no se ponga en "riesgo" a las empresas energíéticas españolas y abogó por profundizar en la "colaboración" de las distintas administraciones.