J.J Cobo y dejo el ciclismo, os paso noticia del viernes en el mundo:
VUELTA | La resurrección de un ciclista.
Cobo supera su 'Angliru' personal.
Tras un año y medio sin resultados ni ganas, en junio le dijo a su director que dejaba el ciclismo.
Hoy es octavo en la vuelta y no se marca metas; cree que la presión pudo con íél en 2010.
Ganó una etapa pirenaica del Tour, la díécima de la edición 2008 en Hautacam. Dos días despuíés abandonaba la prueba francesa por decisión de un equipo que perdería el patrocinio entre escándalos, Saunier Duval. En 2009, bajo la denominación Fuji-Servetto, continuó su cosecha de etapas en grandes rondas con un triunfo en La Granja de San Ildefonso, la díécima novena de aquella Vuelta a España, que terminó en díécima posición de la general. Ese año acabó bien, con una novena plaza en la clásica de Lombardía y un contrato con el equipo español más laureado, el Caisse d'Epargne, heredero del Banesto y precursor del actual Movistar. Y Juan Josíé Cobo desapareció del mapa.
El annus horribilis duró más de 12 meses. Justo hasta este mismo mes de agosto en el que el cántabro luce de nuevo galones en la Vuelta a España. En realidad, el 'clic' competitivo se le reactivó en la Vuelta a Burgos, que acabó en tercera posición. ¿Quíé ocurrió durante el paríéntesis de 2010? í‰l mismo duda, aunque termina por conceder que la presión le venció y los nervios lo traicionaron. Que llegó a un equipo nuevo, trascendente, de primera línea y con historia. Y se apocó. No sentía las piernas en las carreras, no entendía muy bien las directrices. Se quedó atrapado en pensamientos y sentimientos contradictorios.
En 2011 volvió a la que había sido su casa. Su gente de confianza del antiguo Saunier Duval lo recibió con gestos de ánimos. Pero la depresión era profunda y el plan de recuperación estuvo a punto de fracasar definitivamente. "En el Campeonato de España soltíé finalmente lo que llevaba pensando durante meses. Sólo se lo dije a Matxin (su director deportivo Joxean Fernández): que había pensado en retirarme. Estaba hundido, iba a las carreras, pero no cogía la bicicleta cuando no competía", reconoció Cobo.
"Matxin me dijo que continuara hasta final de año, que no lo dejara del todo. Comencíé a entrenar en julio y recuperíé un poco la moral. Despuíés fui entrando en competición y me vi como antes, como siempre. En la Vuelta a Burgos comprendí que podría hacer una buena Vuelta a España", asegura el ciclista, nacido en Torrelavega, pero natural de Cabezón de la Sal, hace 31 años. Insiste Cobo en que no le sorprende su rendimiento, porque lo que está haciendo en esta carrera, estar con los mejores en las etapas más difíciles, ya lo había hecho antes de la crisis.
Dice que corre sin presión ahora y que no sabe cuál será su rendimiento en lo que queda de Vuelta. "No me he preparado como para estar en el podio o ganar la carrera. Intentaríé hacer lo mejor posible, pero el líder sigue siendo Denis Menchov", asegura el mejor clasificado del Geox, octavo, y el portador del dorsal 161, aunque el equipo explicó que ese primer número de la decena le correspondió por puro orden alfabíético, no porque sea el líder.
Sin galones que mostrar, Cobo parece decidido a volver a los buenos tiempos. Y para no recaer está valorando la oferta de un conocido suyo, ajeno al mundo del ciclismo, de apoyarse en un psicólogo que le ayude a superar momentos complicados. "Lo estoy pensando", comenta.
La idea de la retirada ya no tiene sentido. Geox le ha ofrecido la renovación. Si su Vuelta termina impecable, recibirá más ofertas. "No quiero pensar en ello, sólo en las etapas". Y sobre su rendimiento en este fin de semana, advierte que sólo teme un poco al Angliru. "No conozco ninguna de las subidas, pero me da más miedo el Angliru, porque soy bastante pesado y en las pendientes excesivas sufro mucho".
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