El pánico bursátil desatado por el nuevo azote a la deuda soberana europea y la rebaja del rating a EE UU provocó la huida en agosto de los inversores de los fondos con un perfil de riesgo elevado. Por quinto mes consecutivo, el saldo fue negativo, con unos reembolsos netos de 699 millones. Los monetarios fueron los beneficiados.
El Ibex cerró el miíércoles el peor mes de agosto en 13 años. Cayó un 9,5%, pero en los peores momentos del tsunami bursátil las píérdidas llegaron a superar el 17%. Este desplome, provocado por las dudas sobre la solvencia de algunas de las principales economías de la eurozona y la decisión de S&P de recortar el rating de EE UU, ha puesto la puntilla a la ya debilitada industria de los fondos de inversión.
Por quinto mes consecutivo, el balance ha sido negativo, con unos reembolsos netos en agosto de 699 millones de euros, según los datos avanzados ayer por Inverco, la patronal del sector. Con ello, el patrimonio de los fondos de inversión mobiliaria se situaba a finales de agosto en 130.903 millones, lo que supone un descenso del 2,42% respecto a julio y una píérdida del 40,07% respecto a hace un año. El número de partícipes tambiíén ha disminuido hasta los 5,09 millones, un 0,25% menos.
La huida de los inversores de los productos con un perfil de riesgo más elevado, como los de renta variable mixtos y puros, y de los fondos de renta fija de larga duración tuvo un claro beneficiado: los monetarios. Esta categoría, según Ahorro Corporación Gestión, registró unas suscripciones netas positivas por primera vez desde marzo de 170 millones, favorecidos en gran parte por la decisión del BCE de comprar bonos perifíéricos. Una medida que permitió que la prima de riesgo española cayera de golpe 100 puntos básicos.
Por rentabilidades, los peor parados son los fondos que invierten en acciones, con un descenso en agosto del 14,01%, muy por encima del Ibex, y acumulado en el año del 14,37%. Los mixtos de renta variable tampoco firmaron un buen resultado, con una caída mensual y anual por encima del 6%. En el lado opuesto, los monetarios ofrecieron en agosto una rentabilidad del 0,23% y desde enero del 1,12%.
Gestoras
Las gestoras más afectadas por la salida de partícipes fueron aquellas como vinculadas a bancos y cajas, como Bestinver Gestión que sufrió una píérdida de patrimonio del 13,5%; Mutuactivos (-15,2%) o Gaesco Gestión (-11,2%).
Pero las grandes gestoras tambiíén se vieron salpicadas por el nerviosismo. La de Santander registró un descenso de patrimonio del 3,2%, aunque conserva el liderazgo por volumen de patrimonio. En BBVA el descenso fue del 1,5% y en Invercaixa del 1,6%.
