Standard & Poor's amenaza con rebajar la nota a 15 aseguradoras europeas
EFe
La agencia de calificación de riesgo Standard & Poor's puso hoy bajo revisión para una posible rebaja la nota que otorga a 15 aseguradoras europeas, incluidas las españolas Mapfre y Nacional de Reaseguros, días despuíés de amenazar con degradar a 15 de los 17 países de la zona euro.
La acción, que supone que existe un 50 % de probabilidades de que la calificación de esas empresas aseguradoras sea degradada en los próximos 90 días, es consecuencia del análisis para una posible rebaja en el que colocó este lunes a 15 de los 17 países de la zona euro, según explicó S&P en un comunicado.
Además de las dos españolas, S&P puso en revisión para una posible rebaja a la alemana Allianz, las británicas Aviva y Unipol, las francesas Axa, CCR y CNP, las italianas Generali y Cattolica, las irlandesas IPB y RSA, la portuguesa Millenniumbcp-Ageas y las eslovenas Pozavarovalnica Sava y Triglav Group.
"Dependiendo de los resultados que obtengamos de nuestra revisión de los Gobiernos de la zona euro, las calificaciones a largo plazo de estas aseguradoras podrían rebajarse en uno o dos escalones, y las notas a corto plazo de algunas podrían degradarse un peldaño", indicó la agencia.
En el caso de Mapfre, a la que en la actualidad otorga una nota de "A", la rebaja podría ser de dos escalones, al igual que otras aseguradoras como Allianz, Axa o Aviva, mientras que en el caso de Nacional de Reaseguros, cuya calificación actual es de "A+", la rebaja podría ser de un escalón, al igual que Unipol y Cattolica.
El pasado 5 de diciembre S&P amenazó con degradar a quince países de la zona euro, incluidas las seis naciones que gozan de la máxima calificación "AAA": Alemania, Francia, Holanda, Austria, Finlandia y Luxemburgo, una decisión que atribuyó a la crisis de deuda a la que se enfrentan.
La agencia justificó entonces su decisión porque creen que el estríés sistemático en los países que comparten el euro ha aumentado en las últimas semanas de tal modo que ahora puede presionar a la baja la calificación de la eurozona en su conjunto, en medio de las tensiones crediticias en los países perifíéricos.