NUEVA YORK - Ocho ex ejecutivos de Siemens fueron acusados de planear pagar $100 millones en sobornos para asegurar un contrato de $1 mil millones para producir tarjetas de identidad nacional para ciudadanos argentinos, en una estafa que involucraba un "nivel escandaloso de engaño y corrupción", dijo un vicefiscal federal de Estados Unidos.
Una acusación formal emitida la noche del lunes en una corte federal en Nueva York afirma que los acusados confabularon desde 1996 hasta principios de 2007, cuando trabajaban para la empresa de ingeniería alemana con sede en Munich.
Un ex miembro del comitíé central ejecutivo de Siemens AG, Uriel Sharef, y dos ex directores de Siemens Argentina fueron algunos de los acusados de asociación delictuosa para violar la Ley de Prácticas de Corrupción en el Extranjero y el estatuto de fraude electrónico, según el Departamento de Justicia. Asimismo, fueron acusados de lavado de dinero, confabulación y fraude electrónico.
"La acusación de hoy señala un supuesto nivel escandaloso de engaño y corrupción", dijo el vicefiscal Lanny A. Breuer. "Los negocios deben ganarse o perderse con base en los míéritos de los productos y servicios de una compañía, no por la cantidad de sobornos pagados a funcionarios gubernamentales".
Ninguno vive en Estados Unidos
Los cargos contra Sharef marcaron la primera ocasión que un miembro de la mesa directiva de una de las compañías colocadas en la lista de 50 de Fortune Global ha sido acusado en un caso contra la Ley de Prácticas de Corrupción en el Extranjero, dijo Breuer. No había sido puesto en custodia el martes. Un mensaje dejado con un abogado que lo ha representado no fue contestado de inmediato. Ninguno de los recipientes de los sobornos fueron nombrados en la acusación y ninguno de los acusados está en Estados Unidos.
Breuer dijo que era política del Departamento de Justicia no nombrar a las personas que no están acusadas y que Estados Unidos colaboraría con otros países para llevar a los acusados ante la justicia.
Siete de los acusados tambiíén tenían cargos en un caso civil en Nueva York en el que la Comisión de Cambio y Bolsa (SEC, por sus siglas en inglíés) los acusó de violar la Ley de Prácticas de Corrupción en el Extranjero. Esta es la mayor acción de la Comisión en contra de personas acusadas de sobornar a un funcionario extranjero, dijo Robert Khuzami, director de la oficina de seguridad de la Comisión.
Los acusados se comprometieron a pagar $100 millones en sobornos a funcionarios argentinos y de hecho pagaron más de $60 millones, incluidos más de $25 que fueron lavados a travíés del sistema bancario estadounidense.
El caso es parte de un escándalo amplio de corrupción que le ha costado a Siemens $1 mil millones en multas en Alemania y Estados Unidos.