Japón y China acordaron iniciar negociaciones formales para un pacto de libre comercio en el noreste asiático que tambiíén incluiría a Corea del Sur, anunció el domingo el primer ministro japoníés Yoshihiko Noda tras conversaciones que mostraron los profundos lazos entre las dos principales economías asiáticas.
Japón tambiíén dijo que espera comprar bonos del tesoro chino, y los dos gobiernos acordaron mejorar la cooperación financiera .
"Respecto a un pacto de libre comercio entre Japón, China y Corea del Sur, hemos hecho un avance sustancial para un pronto inicio de las negociaciones", dijo Noda a periodistas tras reunirse con su par chino, Wen Jiabao.
Pese a la política a veces hostil entre ambos vecinos, la fortuna económica nipona está cada vez más ligada al crecimiento económico y a la demanda de consumo de China, que ha sido el mayor socio comercial de Japón desde el 2009.
En el 2010, el comercio entre las dos naciones creció un 22,3 % respecto a los niveles del 2009, llegando a 26,5 billones de yenes (339.300 millones de dólares), según la Organización de Comercio Exterior de Japón.
El anuncio se suma a un acuerdo entre los tres países el mes pasado para buscar tambiíén un acuerdo trilateral de inversiones y finalizar para fines de diciembre los estudios respecto al acuerdo de libre comercio propuesto.
"China desea coordinar de cerca con Japón la promoción del desarrollo financiero y monetario de nuestros dos países, y acelerar el progreso de la zona de libre comercio China-Japón-República de Corea y la cooperación financiera del este asiático", dijo Wen en la reunión, según el sitio electrónico del Ministerio de Relaciones Exteriores chino (
www.mfa.gov.cn).
Pero las negociaciones comerciales regionales tambiíén podrían competir por atención con el esfuerzo de Washington para crear la Asociación Trans-Pacífico luego de que Japón dijera el mes pasado que quiere unirse a las conversaciones sobre la propuesta estadounidense.
En una declaración emitida despuíés de la reunión de ambos líderes, el Gobierno nipón dijo que buscará comprar bonos gubernamentales chinos, un posible paso hacia la diversificación de las enormes reservas en divisas extranjeras de Tokio, que se estima están compuestas en su mayoría por dólares