El Ministerio de Economía empieza a perfilar los tíérminos del saneamiento extraordinario de los activos adjudicados. Fuentes del sector afirman que exigirá provisionar el suelo rústico al 95%; el urbanizable, al 60%; las promociones no acabadas, al 50%, y las terminadas, al 30%. No impondría esfuerzos adicionales por críéditos dudosos ni subestándar.
En el sector todos conocen el importe global de la factura, pero pocos o ninguno saben a cuánto toca su parte. Por eso, los banqueros del país están expectantes. Luis de Guindos, ministro de Economía, estima en 50.000 millones de euros el saneamiento extraordinario que deben acometer las entidades de críédito para despejar las dudas que despierta su exposición al sector inmobiliario. Así lo indicaba en una entrevista publicada por Financial Times el pasado 5 de enero.
Ante sus declaraciones, las dudas se agolpan. ¿Quíé activos estarán sometidos al saneamiento? ¿En quíé medida? ¿Y cuál será el plazo para asumir el golpe? Las respuestas serán lo que determine si una entidad podrá continuar su rumbo sola o si se verá obligada a hincar la rodilla y rendir las armas ante algún rival en una fusión.
El propio ministro y su equipo han dado pistas de sus intenciones en encuentros informales con representantes de la banca.
Personas presentes en alguna de estas citas apuntan que el Ministerio de Economía reconoce en público que será necesario cubrir entre el 90% y el 95% del valor los suelos rústicos adjudicados en balance. Los representantes gubernamentales consideran que resulta imposible desprenderse de ellos al precio al que fueron recibidos. Los solares urbanizables deberán estar provisionados, a su vez, al 60% de su valor. Los esfuerzos para las promociones tambiíén se incrementarán. Las fases de viviendas no terminadas deberán estar dotadas al 50%, mientras que para aquellas que están completas se exigirá una provisión del 30%. Sin entrar en estos detalles, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, lo resumió el sábado con un ejemplo: "si un solar vale 100, no puede figurar en el balance que vale 1.000".
La normativa en vigor del Banco de España sobre dotaciones dicta que "deben ser reconocidos los activos recibidos en pago de deudas ... teniendo en cuenta el deterioro estimado ... y en todo caso un mínimo del 10%". Para fijar el valor del bien se tomará la cifra más baja de estas dos alternativas: su valor contable o una tasación de mercado.
El supervisor tambiíén impone, no obstante, que el grado de cobertura del activo se amplíe conforme se dilate su presencia en el balance. De esta forma, cuando transcurren 12 meses deben incrementarse las dotaciones al 20% de su valor, y rebasados los dos años de antigí¼edad hasta el 30%. El organismo que encabeza Miguel íngel Fernández Ordóñez impone estas aportaciones porque "la antigí¼edad en balance de los activos en pago de deudas es un inequívoco indicio de deterioro".
El Banco de España cifraba en su informe de estabilidad de noviembre en unos 176.000 millones de euros los activos problemáticos en balance, entre adjudicados, críéditos morosos y príéstamos al corriente de pago pero susceptibles de pagar (subestándar). De este importe, el 30% ya se encuentra provisionado.
Las fuentes bancarias consultadas apuntan que, en principio, solo se exigirán dotaciones adicionales sobre los activos adjudicados. Es decir, no habría que reservar más dinero por los príéstamos dudosos ni subestándar. Haber establecido esta exigencia, añaden dichas fuentes, "hubiera supuesto el desplome de muchas entidades, incluso varias importantes. Hasta los dos grandes bancos internacionales lo pasarían mal".
Economía considera que el saneamiento de los adjudicados debe digerirse en un par de años. A aquellos incapaces de seguir el ritmo les espera una nueva ronda de consolidación. Rajoy se ha comprometido, eso sí, a cerrar el proceso sin coste para el contribuyente.
Las cifras
176.000 millones estima el Banco de España que es el valor de los activos problemáticos de bancos y cajas. El supervisor no desgaja las partidas del importe.
400 millones ha dotado en 2011 Banesto con carácter extraordinario para acelerar el saneamiento de sus inmuebles.
Bankia será el grupo más castigado
Todos los banqueros consultados reconocen en privado que si alguna entidad se verá especialmente perjudicada por el saneamiento extraordinario que ultima el Ministerio de Economía, esa es Bankia y, en especial, Grupo Financiero y de Ahorro, matriz de la entidad cotizada y donde se dejaron los activos de suelo. El grupo resultante de la fusión de Caja Madrid, Bancaja y cinco cajas cuenta en su balance con una cantidad muy relevante de suelo, promociones a medio hacer y viviendas. Aun así, el grupo no ha detallado cifras a cierre de septiembre sobre adjudicados. Fuentes sectoriales calculan que BFA podría tener que dotar, bajo estimaciones "conservadoras", 5.000 millones de euros extra. Es decir, el 10% de los 50.000 millones fijados para el sector.
La semana pasada, Banesto anunció que, en 2011, destinó 400 millones de euros voluntarios a la limpieza de su balance. Fuentes próximas a la entidad estiman que podría tener que provisionar 1.500 millones para cumplir con las exigencias de Economía.
Josíé García Cantera, consejero delegado de la firma, considera necesario que los saneamientos se basen en tasaciones actualizadas de todos los activos para que el esfuerzo sea homogíéneo. El sector ha tomado buena nota.