La actividad fabril de China probablemente cayó por tercer mes consecutivo en enero, mostró el viernes una encuesta a gerentes de compras. lo que sugiere que las políticas pro-crecimiento de Pekín serán mantenidas pese a señales tempranas de que la tendencia a la baja se está desacelerando.
El índice chino anticipado de gerentes de compras (PMI, por su sigla en inglíés) elaborado por HSBC, el indicador más temprano de la actividad industrial del país, se situó en 48.8 en enero, un máximo de 3 meses y una ligera mejora sobre la lectura final de 48.7 en diciembre.
Mejorías en los subíndices que miden los nuevos pedidos de exportaciones, una acumulación de trabajo y de existencias de productos terminados fueron señales de fortalecimiento de la actividad.
Sin embargo, la lectura general se mantuvo por debajo del nivel de 50 -que demarca la expansión de la contracción- donde ha languidecido durante la mayor parte de los últimos 7 meses.
El total de las nuevas órdenes marcó un máximo en tres meses, pero le faltó por un escaso margen para volver por encima del nivel de 50.
Las áreas de preocupación para los inversores permanecen al lado de los puntos más brillantes, sin embargo, con el índice total de producción indicando una contracción más rápida en enero que en diciembre - una tendencia que tambiíén se refleja en las existencias y cantidades de compras.
"Las empresas más vulnerables son las altamente exteriorizadas del sector manufacturero (...)especialmente las firmas más pequeñas, hacia las que se inclina hacia el PMI anticipado de HSBC", dijo Jeremy Stevens, economista de China con el Standard Bank en Pekín.
"Estas firmas más pequeñas tienen largos tentáculos que se extienden profundamente hacia de la economía más amplia. Los datos confirman que muchas han visto obligadas a adoptar un modo de bloqueo, lo que favorece la preservación de efectivo sobre la generación de ingresos", escribió Stevens en una nota a clientes.
El deterioro de la demanda de los socios comerciales más importantes de China en la Unión Europea y Estados Unidos ayudó a arrastrar el crecimiento en la segunda mayor economía del mundo a su nivel más bajo en dos años y medio en el último trimestre del 2011.
El subíndice de los nuevos pedidos de exportación, sin embargo, logró rebotar a 51.1 desde un mínimo en tres meses.
Esto siguió una serie reciente de datos oficiales que mostraron un alza sorprendente en el crecimiento de la producción industrial a 12.8 por ciento en diciembre del 2011 desde un año atrás y un salto en tíérminos interanuales de un 18,1 por ciento en las ventas minoristas.
Sin embargo, los datos oficiales tambiíén han mostrado una caída en el crecimiento de la inversión en activos de renta fija y una desaceleración en la tasa de inversión inmobiliaria, que ha sido un motor clave de la expansión económica
