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Los consumidores europeos se enfrentan a costos cercanos a los 166 mil millones de dólares a mediano plazo, como resultado de las políticas comunitarias para promover los biocombustibles, afirmaron hoy organizaciones ambientalistas.
La suma corresponde al impacto a enfrentar por el transporte desde ahora hasta el 2020, según las agrupaciones Amigos de la Tierra y ActionAid.
El objetivo de la Unión Europea (UE) considera la posibilidad de reorientar al menos el 10 por ciento del transporte hacia biocombustibles y energías renovables en los próximos ocho años.
Con esa medida, la UE aspira a recortar las emisiones de gases en torno al 21 por ciento, si bien ello podría reflejarse en el aumento del seis por ciento en el precio de los cereales.
Para los ambientalistas es poco probable que los biocombustibles contribuyan a disminuir el efecto invernadero pues las áreas forestales serian taladas para crear espacio a las plantaciones utilizadas como materia prima.
Los consumidores y contribuyentes pagarán por una política que consideramos dará muy poco beneficia y por el contrario, dejará extensas afectaciones en el entorno, además de hambre y pobreza; lo que necesitamos para reducir el consumo energíético es desarrollar de vehículos más eficientes y un mejor sistema de transporte publico , añadieron.
Las autoridades comunitarias, por su parte, estimaron que solo con parámetros de eficiencia no se logrará el recorte necesario en las emisiones de carbono y por ello es necesario apostar a fuentes renovables.
