La familia Del Pino sigue haciendo caja en Ferrovial. Entre los días 18 y 20 de enero ha vendido otras 912.393 acciones –el 0,12% del capital- por las que se ha embolsado alrededor de 8,5 millones de euros. Las ventas han sido realizadas por la instrumental Portman Baela, que controla la participación mayoritaria de la familia en el grupo de construcción y de servicios.
Las últimas operaciones se han realizado a precios situados entre los 9,18 y los 9,32 euros por acción y amplían la ofensiva vendedora realizada por la familia en el valor en los últimos días. Entre el 4 y el 10 de enero enajenaron 1,26 millones de títulos entre 9,47 y 9,55 euros por acción y entre los días 11 y 17 se desprendieron de otros 2,63 millones de títulos. En total, la familia se ha metido en bolsillo 45 millones de euros.
La cotización del grupo constructor y de servicios ha encajado con entereza esta gran salida de papel procedente de su accionista mayoritario. Aunque en plena oleada vendedora llegó a caer hasta un mínimo en enero de 9 euros, el valor se ha recuperado rápidamente. Ayer cerró a 9,4 euros y ya gana un 1,86% en lo que va de año.
La reacción tiene más significado si se tiene en cuenta el historial bursátil reciente de Ferrovial. El grupo subió un 25,4% el año pasado, bajo apenas un 9,6% en 2010 y vivió un extraordinario rally del 54% en 2009 con el que el mercado premió su fusión con Cintra.
Por lo tanto, la familia ha hecho un buen negocio siguiendo la estrategia contraria a la del año pasado. A mediados de 2011, elevó desde el 44,26% hasta el 45,57% su participación Ferrovial reinvirtiendo en acciones del grupo parte de la retribución que reciben como consejeros del grupo.
Tras las últimas ventas, el valor de mercado de la participación de la familia Del Pino se sitúa alrededor de los 3.050 millones de euros. Sensiblemente más que en 2009, cuando tras la integración con Cintra y el correspondiente canje de acciones, la familia redujo su presencia desde el 56% hasta el 44,6% dejando por primera vez la mayoría accionarial del grupo. Entonces su paquete estaba valorado en 2.500 millones de euros.
Entre el resto de accionistas de la compañía figura el fondo Southeastern Asset Management, con una participación del 5%, y el Banco Santander, con un 4% que, en su mayor parte, corresponde a acciones compradas para atender el plan de opciones sobre acciones del grupo.
Máxima actividad desinversora
La familia Del Pino está gestionando de forma muy activa la cartera de participadas a travíés de su sociedad patrimonial Casa Grande de Cartagena. El año pasado vendió su 5% en el Banco Pastor, en una operación en la que materializó grandes minusvalías.
Y el pasado mes de diciembre, vendió entre inversores cualificados un paquete de 2,5 millones de acciones de Ebro Foods –el 1,62% del capital- por 35,37 millones de euros. La familia Del Pino entró en Ebro en noviembre de 2006 y desde entonces acumula jugosas plusvalías
