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El Banco de la Reserva de Australia ajustó hoy a la baja los pronósticos de crecimiento económico para el 2012, con una expansión prevista del 3,5 por ciento en el Producto Interno Bruto.
Según el ente emisor, ese vaticinio representa una reducción de medio punto en comparación con los estimados emitidos a finales de noviembre pasado (cuatro por ciento).
La institución recordó que el país experimentó en el 2011 el menor crecimiento del empleo en 19 años, en tanto la tasa de paro se ubicó en el 5,2 por ciento de la población activa al cierre de diciembre.
El banco mencionó además la tendencia al alza en los precios de productos básicos, en especial los minerales, lo cual resulta de interíés para Australia.
En ese sentido, señaló que el valor del mineral de hierro se incrementó al reflejar un fortalecimiento de la demanda de China.