Por... FEDAEPS
El fenómeno del endeudamiento de los países aparece como un elemento medular al momento de visibilizar una de las dimensiones de la crisis sistíémica del capitalismo: la financiera. La espiral de endeudamiento, agudizada en las últimas tres díécadas, tiene relación directa con el poder mundial ganado por del sistema financiero que, respaldado por las políticas de las Instituciones Financieras Internacionales –IFI-, ha extendido sus prácticas especulativas a todas las esferas. Las dinámicas de endeudamiento, así inducidas, abarcan desde la economía personal y familiar, hasta las estructuras más amplias de endeudamiento de países, regiones y a nivel global, afirmó la ecuatoriana Magdalena León(GND – FEDAEPS) al presentar el Panel – foro ‘Deudas ilegítimas y crisis mundial: aprendizajes y perspectivas de la auditoría ecuatoriana’, organizado conjuntamente por el Grupo Nacional sobre la Deuda –GND-, la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Central del Ecuador y la Comisión Tíécnica para la Nueva Arquitectura Financiera Internacional – Banco del Sur[1].
Añadió que, en ese contexto, las conclusiones arrojadas por Auditoría Integral del Críédito Público, realizada por Ecuador en 2008 -la primera experiencia mundial de un país que impulsa una investigación oficial de tal magnitud- además de probar la aplicabilidad y utilidad del enfoque de deuda ilegítima, demuestran que los procesos de endeudamiento no se dan sólo en el marco de relaciones financieras , sino de un complejo entramado de intereses y presiones económicas, geopolíticas y políticas, y a travíés de mecanismos que operan como un verdadero sistema.
Esos resultados adquieren redoblada importancia de cara a las ‘crisis de endeudamiento’ más recientes, que azotan esta vez a países del Norte, especialmente europeos, donde se ha manifestado ya interíés en recoger la experiencia ecuatoriana como pauta para desarrollar sendas auditorías, que permitan develar las decisiones, condiciones, beneficiarios e impactos del sobre endeudamiento que ha estallado en crisis.
Un conjunto de auditorías podría llevarnos a evidencias más certeras de cómo el actual sistema está fundamentado en lo especulativo financiero, y establecer elementos de solución que permitan romper con las cadenas del endeudamiento sin fin, concluyó León al introducir el Panel-foro, que contó con las intervenciones de Franklin Canelos (GND – CLAI, Ecuador), Antonio Jarquín (Observatorio Internacional de la Crisis, Nicaragua), Fredy Trujillo (Comisión NAFR, Ecuador) y Jorge Acosta (Cancillería, Ecuador).
Por su parte, el investigador nicaragí¼ense Antonio Jarquín, integrante del Observatorio Internacional de la Crisis, acotó que uno de los aspectos centrales de la actual crisis del capitalismo, es la conjunción de especulación financiera y gasto militar, pues identificó al complejo industrial militar como la otra cara de la medalla definitoria de las reglas del juego del capitalismo mundializado y, por tanto, de su crisis de endeudamiento.
Jarquín recalcó, además, que los niveles iníéditos de especulación, expuestos por el PIB mundial -2008-2009- situado alrededor de 55-60 trillones de dólares, en tanto circulaban: dinero, papeles y productos derivados -que son capital ficticio-, equivalentes a 20 veces ese valor, demuestran la catastrófica situación de bancarrota a la que el sistema económico y financiero ha llevado al mundo . En otras palabras, si por cada 20 dólares de moneda circulante, apenas uno tiene sustento en la producción de la economía real, diecinueve no tienen respaldo.
El investigador advirtió que en 2011 Estados Unidos, apenas tuvo un ingreso de 14.4 billones de dólares y que no obstante gastó 57 billones, es decir, cuatro veces más que sus ingresos. A la par, en esta enorme brecha de endeudamiento e ingreso, se sitúa en el centro la acumulación de inversión en gastos militares que es aproximadamente la mitad de ese endeudamiento. Esto muestra tambiíén el enorme peso específico que la inversión militar tiene en la destrucción de la economía real y civil.
Ante esta situación, resulta imprescindible construir sistemas financieros y económicos con nuevas reglas, bajo principios de complementariedad y solidaridad, con nuevos mecanismos, que para el caso de Amíérica Latina se traduzca en un sólido sistema de asistencia mutua, cooperación y solidaridad regional, agregó Jarquín.
Deuda y dominación
Franklin Canelos, quien fue integrante de la Comisión de Auditoría del Críédito Público –CAIC- del Ecuador, expuso que si bien la deuda ha llegado a ser parte de cualquier economía, es necesario delinear políticas para delimitar las reglas de juego, sin las cuales quedan expuestas a mecanismos de especulación y dominación.
Enfatizó en que el endeudamiento se impone, en muchos casos, bajo condicionalidades que afectan la soberanía del Estado, como sucede con la obligatoriedad a los países endeudados de cambiar su legislación para adaptarse a los intereses de las grandes corporaciones. Lo más lamentable de este tipo de endeudamiento es que suele contar con la complacencia de algunas autoridades, que se prestan a juegos especulativos financieros en perjuicio del interíés nacional, señaló Canelos. Por ejemplo, en el caso ecuatoriano, la auditoria demostró, que se impuso una gran cantidad de condiciones para hacer viables estrategias de pago de críéditos anteriores usando los nuevos críéditos que nunca fueron dineros frescos.
En el pasado hasta el 65% del presupuesto general de Ecuador llegó a ser orientado al pago del servicio de la deuda. Con este sistema de endeudamiento inmensas cantidades de dinero fueron transferidas del Sur al Norte. Así mismo, un país que no podía pagar los servicios de la deuda se vio obligado a expandir su frontera agrícola, a extraer más recursos naturales y finalmente entregar a las corporaciones transnacionales nichos , que en última instancia fueron al pago de la deuda.
Deuda y renuncia de la soberanía
Jorge Acosta, Subsecretario de Relaciones Exteriores, Comercio e Integración, señaló que la auditoría ecuatoriana visibilizó no sólo la manipulación especulativa de los críéditos, sino la renuncia de cualquier principio de soberanía financiera nacional en esas transacciones. Un ejemplo de esas prácticas, fue evidenciado por la auditoría de la firma del Tolling Agreement en 1992, que condujo al país a desconocer cerca de 7 mil millones dólares de deuda, pero que no pudo concluir, porque representantes neoliberales de la íépoca plantearon a los acreedores un acuerdo para que eso no sucediera. Renunciaron a anular una parte importante de la deuda y renegociaron un acuerdo para que la deuda no pierda vigencia. Este caso se encuentra actualmente en la Fiscalía para su investigación.
Ante esas dinámicas perversas, Acosta destacó el rol central que tuvo la auditoría para reconceptualizar la deuda, entre cuyos resultados inmediatos destacó la renegociación de la deuda comercial, a travíés de un proceso de recompra de bonos, realizado en 2008. El Estado ecuatoriano entró a un proceso de suspensión de pagos, argumentando la ilegitimidad de los críéditos, posteriormente convocó a una subasta inversa de “bonos globalâ€, que eran la mayor parte de deuda comercial, estableciendo un plazo y el precio máximo que el Estado estaba dispuestos a pagar y, a pesar de las críticas por parte de los acreedores y de la banca multilateral, la respuesta fue positiva. El 93% de esta deuda fue resuelta, es decir, la mayor parte de los acreedores participaron de este mecanismo y solo quedó un 7% pendiente, que no constituye ningún riesgo para el país.
Con esa compra los pasivos externos se redujeron en unos 3 mil millones de dólares. Ecuador dejó de pagar 300 millones anuales en promedio de intereses y más de 3 mil millones hasta el 2030 como estaba considerado el plazo de pago de esa deuda. Esos recursos se reasignaron a programas sociales y a otros beneficios populares!
Nueva arquitectura financiera internacional
Fredy Trujillo, integrante de la Comisión Tíécnica para la Nueva Arquitectura Financiera Internacional y Banco del Sur, acotó que en respuesta a todos los problemas originados por el capital financiero especulativo, es necesario trabajar desde una perspectiva regional, porque en el actual contexto internacional los países han perdido capacidad de posicionar sus instrumentos de política económica frente a los grandes capitales multinacionales.
Por lo tanto, a nivel regional Ecuador ha propuesto una nueva arquitectura financiera fundamentada básicamente en tres componentes:
1.Un Fondo del Sur, planteado como alternativa propia -pero tambiíén como alternativa al Fondo Monetario Internacional-, que se sustenta, entre otros, en la repatriación de las grandes cantidades de reservas y el potencial autogestionario de los fondos relacionados, hasta ahora encajados por el Norte.
2. En un país donde, por herencia el neoliberalismo, no se tiene política monetaria propia, como es el caso ecuatoriano (que tiene como moneda el dólar estadounidense), hay que crear instrumentos de política monetaria alternativos. En ese sentido, se están fortaleciendo sistemas de compensación de pago, que ayudan a optimizar reservas y disminuyen la presión de utilización del dólar. El SUCRE -que funciona como moneda virtual en los países del ALBA- es uno de esos sistemas, que permite liberar la presión de utilizar dólares en el comercio regional. Un sistema como íéste ayuda no solo a Ecuador sino a toda la región.
3. Igualmente se busca crear una institución regional de críéditos. Este es el caso del Banco del Sur. Algunos se preguntan ¿por quíé? si ya está el BID y la CAF. La respuesta es que, por ejemplo, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) ha tenido píérdidas por inversiones especulativas y, a lo largo de 30 años, no ha logrado construir una propuesta propia y más bien ha conducido a una destrucción institucional. Por ello, en este marco, resulta necesaria una nueva arquitectura financiera, para no recurrir a esos viejos esquemas.
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[1] El evento se realizó el 14 de noviembre de 2011, en el Paraninfo de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Central, en Quito.