Por... Janeth Ochoa
La empresa debe saldar una suma de hasta 1,000 millones de dólares que debe a Irán por el petróleo crudo ay que desea seguir en buenos tíérminos con NIOC.
Royal Dutch Shell afronta problemas para saldar una suma de hasta 1,000 millones de dólares que debe a Irán por el petróleo crudo, ya que las sanciones financieras impuestas por la Unión Europea y Estados Unidos sobre el Estado islámico hacen casi imposible procesar los pagos, según fuentes de la industria.
Cuatro fuentes afirmaron que la gigantesca petrolera le debe una elevada cifra a National Iranian Oil Co (NIOC) por las entregas de petróleo crudo, y una de ellas reveló un monto cercano a los 1,000 millones de dólares.
Una deuda de ese tamaño equivale a casi cuatro cargas de los tanqueros más grandes de crudo iraní o unos ocho millones de barriles.
"Shell está trabajando duro para encontrar una forma de pagarle a NIOC", dijo una fuente de la industria que pidió el anonimato. "Es muy difícil y muy delicado. Quieren seguir en buenos tíérminos con Irán, y al mismo tiempo obedecer las sanciones", agregó.
Un portavoz de Shell no quiso comentar la situación.
La Unión Europea endureció las sanciones financieras e implementó un veto sobre las importaciones de petróleo iraní el 23 de enero, pero le dio a las compañías hasta el 1 de julio para finalizar sus negocios existentes.
Con volúmenes de contrato diarios por 100,000 barriles, Shell era el segundo mayor cliente corporativo de Irán, junto con la francesa Total, detrás de la firma turca Tupras .
El presidente ejecutivo de Shell, Peter Voser, dijo el 7 de marzo que la empresa tomaría sus entregas finales de crudo iraní "en unas semanas".
Las fuertes medidas financieras europeas y estadounidenses, que buscan castigar a Irán por su programa nuclear, ya están en marcha y han hecho cada vez más difícil los pagos y envíos de crudo desde Irán, dicen ejecutivos de la industria petrolera.
"Hay grandes frustraciones con la ruta de pagos, la presión estadounidense realmente está funcionando", dijo una fuente de la industria. "Ahora es casi imposible utilizar el sistema bancario", agregó.
Las restricciones financieras fueron en parte la razón por la que Total decidió dejar de comprar crudo iraní a fines del año pasado, dijeron fuentes de la industria. Total tambiíén compraba 100,000 barriles diarios desde Teherán.