Wall Street ha recuperado la alegría. Un buen dato manufacturero en abril, claramente mejor de lo esperado, ha permitido al Dow Jones subir un 0,5% y recuperar provisionalmente el nivel de los 13.300 puntos. Sin embargo, el índice de los 'blue chips' no ha podido mantener el empuje hasta el final y ha terminado en los 13.279 puntos, suficiente para que el Dow marque sus máximos desde 2007. El S&P avanza un 0,57% y salta el listón de los 1.400 puntos y, por último, el Nasdaq avanza tambiíén un más suave 0,13%.
El índice ISM de gestores de compra del sector manufacturero estadounidense ha dado la gran sorpresa con una subida en abril hasta los 54,8 puntos desde los 53,4 del mes anterior y muy por encima de las previsiones de los analistas, que apostaban por un retroceso hasta los 53,0 puntos.
Tambiíén ha habido sorpresas positivas desde el lado de resultados empresariales. Pfizer ganó 1.790 millones de dólares, o 24 centavos por acción, en el primer trimestre. Esa cifra se compara con los 2.200 millones de dólares, o 28 centavos por acción, del mismo período del año anterior. Excluyendo extraordinarios, la compañía tuvo un beneficio neto de 58 centavos por acción, por encima de los 56 centavos que esperaba el mercado. Las acciones de Pfizer caen más de un 1%.
Tras el buen dato manufacturero, todas las miradas están puestas en las cifras de empleo de abril, que se publican en viernes. Dado que las cifras económicas no estaban gustando hasta hoy, “los resultados empresariales son el soporte clave, pero los inversores no están muy dispuestos a pagar con las expectativas sobre los beneficios del futuro cuando las perspectivas económicas son sombríasâ€, explica un analista a MarketWatch
