Por... LUIS ALONSO LUGO
WASHINGTON -- El vicepresidente argentino Amado Boudou invitó el martes a empresarios a invertir en el sector energíético de su país, una semana despuíés de que el Congreso aprobó la expropiación del 51% de las acciones que la española Repsol tenía en las empresa Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF).
"Somos optimistas en lo que viene, en la economía argentina en general y en el sector de hidrocarburos en general", dijo el funcionario ante acadíémicos, empresarios y diplomáticos que asistían a la conferencia del Consejo de las Amíéricas. "Esta nueva YPF abierta a inversionistas privados y que nos servirá para superar dificultades en el mercado energíético", agregó.
En su primera visita a la capital estadounidense desde la expropiación de YPF, Boudou reconoció que su gobierno necesita "trabajar sobre la reputación a partir de las transformaciones que hemos venido haciendo" y dijo que para ello "hay que trabajar muy duro, tener mucha predisposición para discutir y solucionar lo que vaya surgiendo lo más rápido posible para salir de este tema".
Repsol anunció que apelará a la vía judicial para defender lo que considera una expropiación ilegítima.
Boudou dijo que la expropiación se llevó a cabo en el marco de la ley argentina y planteó una semejanza entre el caso Repsol y la disputa judicial que mantienen acreedores privados agrupados en el Club de París.
Luego de que Argentina cayó en cese de pagos en 2001 por más de 100.000 millones de dólares en bonos soberanos, un 80% de los acreedores accedió a una reestructuración de la deuda en 2005, pero miles de inversionistas decidieron no participar y han apelado a la vía judicial para recuperar píérdidas que estiman superiores a los 30.000 millones de dólares.
"No hemos arribado a una solución, seguimos en la mesa de análisis buscando una solución aceptable para los acreedores y que sea posible para Argentina pagarla y que sustente crecimiento", dijo Boudou sobre las negociaciones con el Club de París. "Si uno ahoga la capacidad de pago de los países, es imposible cumplir. Disminuir la capacidad de crecimiento (económico) es disminuir su capacidad de pago", añadió.
El presidente de la cámara baja -el republicano John Boehner- antecedió a Boudou en el derecho de palabra y sin especificar país alguno dijo que insistirá en que cada nación del continente "honre el Estado de derecho, cumpla sus obligaciones y respete las normas internacionales. Eso significa pagar deudas a tenedores de bonos, cumplir compromisos legales y decisiones de árbitros internacionales, y respetar la propiedad privada".
Estados Unidos suspendió este año preferencias comerciales que concedía a Argentina alegando que la nación sudamericana incumplió fallos de árbitros internacionales en disputas comerciales iniciadas por dos empresas estadounidenses.