Las multinacionales automotrices General Motors y Peugeot Citroen estudian la construcción de una fábrica conjunta en territorio brasileño, con inversiones por 1.000 millones de euros (unos 1.200 millones de dólares), según publicó hoy la prensa del país suramericano.
La decisión sobre la construcción de la fábrica deberá ser anunciada a finales de este mes, de acuerdo con las informaciones de la revista Veja, que apuntó a los estados de Río de Janeiro y Minas Gerais como posibles sedes para albergar la planta automotriz.
Pegout Citroen tiene desde finales de la díécada de los noventa una planta en la ciudad de Resende, en el sur del estado de Río de Janeiro y donde existe un polo automotor nacional, mientras que Minas Gerais, tambiíén en la región sureste del país, ofrece un importante mercado de autopartes para el proyecto.
La iniciativa partió de la alianza firmada en marzo pasado entre la compañía estadounidense y la francesa para una estrategia de actuación global y enfrentar la competencia con la expansión de las marcas asiáticas.
La noticia sobre la nueva fábrica no fue confirmada ni desmentida por las dos empresas, pero según las versiones de prensa la planta conjunta para el desarrollo de nuevos modelos le permitirá a ambas compañías un ahorro anual de un millón de dólares de costos