Por ELENA BECATOROS
ATENAS -- El nuevo gobierno de coalición de Grecia dijo el sábado que intentará derogar algunos impuestos, cesar los despidos y aplazar por dos años las nuevas medidas de austeridad conforme a los acuerdos internacionales de rescate.
La declaración emitida por los tres partidos gobernantes tuvo lugar despuíés que el nuevo primer ministro Antonis Samaras fue sometido con íéxito a una operación ocular y su ministro de Hacienda, Vassilis Rapanos, seguía hospitalizado en observación tras desmayarse el viernes.
"El acuerdo general es no reducir más salarios ni pensiones, ni mayores impuestos", dijo la declaración, e insistió que no habrá despidos en el sector público.
Samaras, cuyo partido conservador Nueva Democracia llegó primero en los comicios del 17 de junio pero no obtuvo mayoría absoluta para gobernar solo, encabeza un gabinete que incluye al partido socialista PASOK y a otro menor, Izquierda Democrática.
La creación de un gobierno tras dos elecciones nacionales inconclusas puso fin a semanas de incertidumbre y la posibilidad de que Grecia tuviera que abandonar el euro. Ese acontecimiento podría haber agravado la situación económica de Europa y la economía global.
Aunque prometieron respetar los acuerdos de rescate firmados por el país con otras naciones europeas y el Fondo Monetario Internacional, los tres partidos dijeron que intentarán renegociar ciertas partidas.
Grecia atraviesa su quinto año consecutivo de recesión, y ha visto crecer el desempleo al 22%. La furia generalizada ante el deterioro del nivel de vida ayudó a fomentar la aparición de partidos opuestos a las medidas anticrisis en las dos últimas elecciones.
El nuevo gobierno intentará prorrogar por lo menos dos años los plazos para imponer duras reformas fiscales "en respaldo de la demanda y el empleo", agregó.
"De esta manera se podrá alcanzar la meta fiscal sin mayores recortes de salarios y pensiones o del programa de inversiones públicas, al poner coto al derroche y combatir la corrupción, la evasión fiscal" y la economía en negro.
La declaración indicó que intentará reducir los impuestos al consumo en la industria hotelera, agrícola y prolongar por otros dos años los beneficios por desempleo.
Además, intentará prolongar los beneficios por desempleo de los gestores que han perdido su trabajo y aumentar gradualmente el límite de ingresos libres de impuestos a los medios europeos.