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Alrededor de dos tercios de los votantes estadounidenses consideran que la economía nacional se ha debilitado y es, sobre todo, por culpa de políticas del gobierno central en Washington, reveló hoy encuesta.
Un sondeo del diario The Hill encontró que el 66 por ciento de los ciudadanos consultados critica a la Casa Blanca por el mal trabajo económico que provocó una ralentización industrial y un estancamiento en el mercado laboral.
Entre los entrevistados, 34 por ciento señala como responsable al presidente Barack Obama, 23 por ciento apunta hacia el Congreso, 20 por ciento hacia Wall Street, y 18 por ciento opina que la culpa es del exgobernante George W. Bush.
De acuerdo con The Hill y la agencia Pulse Opinion Research, el 53 por ciento de los electores norteamericanos cree que el mandatario demócrata ha auspiciado algunas acciones erróneas o arriesgadas en materia economía que consolidaron la recesión.
En un reciente discurso en Cleveland, Obama alegó que los problemas de expansión en la economía domíéstica fueron causados casi una díécada antes de comenzar su mandato en la Oficina Oval.
Estados Unidos lleva más de medio año con una tasa de desempleo superior a ocho por ciento -lo aceptable es cinco por ciento-, un inventario de 11 millones de desocupados y un ritmo lento en la creación de puestos laborales.
