La Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) y la Liga de Derechos Humanos (LDH) exigieron hoy a la justicia francesa que investigue el papel de empresas galas en el conflicto de Siria, especialmente la compañía tecnológica Qosmos, a la que acusan de vender material al gobierno de Damasco.
Las organizaciones han interpuesto una demanda ante el Tribunal de Gran Instancia de París para pedir una investigación que determine si, tal y como han denunciado diversas fuentes, esta compañía provee de material de vigilancia electrónica al ríégimen de Bachar al Asad, contribuyendo así a la represión de las protestas.
El producto concreto, llamado "Deep Packet Inspection", sirve para analizar en tiempo real datos digitales que circulan por la red, y podría estar siendo utilizado por el Gobierno sirio para rastrear las comunicaciones de la población y de los activistas.
El presidente honorífico de la FIDH, Patrick Baudouin, señaló que "dado que las autoridades francesas denuncian con firmeza la actuación de Al Asad contra el pueblo sirio, es indispensable que se aclare la eventual implicación de empresas galas en el suministro de material de vigilancia del ríégimen".
"Las compañías occidentales deben saber que no pueden vender ese tipo de material a regímenes autoritarios sin que haya consecuencias", añadió su homólogo de la LDH, Michel Tubiana.
La represión gubernamental en Siria se ha cobrado la vida de al menos 16.000 personas, así como decenas de miles de detenciones y desapariciones forzosas, desde que comenzaron las protestas hace 16 meses, según ambos colectivos.