"Nos gusta Grifols, Enagás y Prosegur, pero no somos optimistas con España"
Por Vicente Varó para el Economista
Rory Hammerson habla español casi como si hubiera nacido en Madrid, y no es un detalle baladí. Se ha empapado de la lengua de Cervantes que habla su mujer granadina con la misma facilidad que absorbe la información sobre las pequeñas y medianas empresas europeas, y que plasma en el fondo SWIP Pan European Smaller Companies.
Este producto, aunque retrocede cerca del 15% en el año, según datos de Morningstar, supera tanto a su índice de referencia como a la media de la categoría.
No sólo es merito suyo. Hammerson, que tiene la mejor nota de calidad en la gestión que otorga la consultora Citywire (AAA), dirige un equipo de más de 20 analistas divididos por sectores, en el que cada miembro tiene que justificar hasta el último detalle las razones para invertir en un valor.
¿Cómo tienen su cartera ahora?
Hay que tener en cuenta que nosotros seleccionamos los valores partiendo del análisis de las compañías (bottom up, en la jerga) y no de los sectores o la economía de cada país (top down), pero como consecuencia de esta selección de títulos nos sale ahora una sobreponderación en valores industriales, una infraponderación en financieras y una infraponderación muy fuerte en Reino Unido.
Nuestras conclusiones analizando las compañías se refleja en el estado de la economía. Por eso, ahora tengo muchas más ideas de inversión en la Europa Continental que en Reino Unido, cuya economía está muy díébil. En el resto de Europa hay más potencial alcista, más confianza de los analistas.
¿Por quíé tiene entonces más peso en España que el índice de referencia?
No somos optimistas con España, creemos que está en un momento difícil, como está viendo todo el mundo, y más con las subidas de tipos. Lo que pasa es que hay tres acciones españolas en las que tenemos mucha confianza.
¿Cuáles son estas acciones?
Grifols
Revisión estrategia Grifols, donde todavía tenemos muchas acciones. Estamos en la compañía desde que salió a bolsa. Ha invertido mucho más en investigación y desarrollo que la competencia, lo que le permite sacar más producto. Ha tenido la estrategia y la visión de cultivar y capacidad de investigación, algo que no hicieron las otras dos compañías mundiales de fraccionamiento de sangre. Además, está aprovechando la fortaleza del euro para comprar en Estados Unidos.
La dirección de la empresa es espectacular. No hay ninguna empresa en mi universo que tenga el potencial de crecimiento en beneficios de esta empresa. Para nosotros todavía tiene un potencial alcista muy interesante. Pero cuando lo toque lo estudiaremos y quizá venderemos. No hay que enamorarse de las acciones ni de los mercados.
¿Y las otras dos?
Prosegur
La primera por su conocimiento y por su adquisición en Amíérica Latina. En la segunda, nos gusta la nueva regulación para el sector y el capex (inversión en capital) nos parece muy adecuado. Estamos muy confiados con estas tres empresas.
Ninguna de las tres es cíclica, no dependen del consumo en España.
Efectivamente, no estamos en valores que dependan de la marcha de la economía española. No tenemos Corporación Dermoestíética, por ejemplo, ni tengo ninguna inmobiliaria.
¿Cuál es el horizonte para las pequeñas y medianas empresas?
Positivo. En 12 de los últimos 19 años han tenido rendimientos positivos. A nivel estadístico, en los años positivos ha estado cerca del 24 por ciento, mientras que en los negativos cae de media un 11 por ciento. Hay una relación asimíétrica entre rentabilidad y riesgo. En estos momentos precarios podemos ver más oportunidades. Es curioso que en este año tan difícil se estíén comportando mejor que las grandes. Por eso, hay que centrarse en la selección de acciones (stock picking).
¿Ha comparado las valoraciones con las de la burbuja 'puntocom' en el nivel de las pequeñas y medianas empresas?
No hay comparación. Entonces había empresas sin beneficios operando a múltiplos ridículos, que ni siquiera existían. Se pagó una prima que no se justificó por el crecimiento.
Pero ahora el crecimiento de las pequeñas empresas está en el nivel más bajo en casi 20 años, y los precios están en la zona más alta del gráfico. A largo plazo quizá sea una oportunidad, ¿pero cómo se puede vender en el negocio actual este sector?
La volatilidad de las pequeñas empresas no es tan elevada como antes. Yo estoy dispuesto a pagar una prima cuando este sector ofrece un potencial de crecimiento del 20 por ciento. Muy poca gente sabe por ejemplo que muchas pequeñas empresas tienen más exposición a los emergentes que las grandes.
¿Me podría mostrar ejemplos?
Kone es una empresa finlandesa, de unos 6.000 millones de euros que fabrica ascensores, con una cuota de mercado mundial del 10 por ciento. Hay varias barreras que la dan ventaja: tiene una tecnología inmensamente superior a los demás: puede subir y bajar un ascensor alrededor de 9 metros por segundo, comparado con la media de 6 metros por segundo del sector.
Con lo cual, es eficaz en el consumo en momento de crisis de energía. Además, estamos viendo una inmigración inmensa de población en China hacia las ciudades grandes. Y íéstas no pueden crecer en horizontal, con lo cual los rascacielos serán un elemento básico. Como es la más eficiente, Kone se está aprovechando de ello. Por otro lado, su base global de servicios le permite ganar más cuota, y hay muchos ascensores que renovar en Europa del Este y Rusia.
¿Quíé porcentaje de la cartera podría tener relación con mercados emergentes?
No he realizado el cálculo, pero por ejemplo, las pymes europeas tienen una exposición del 14 por ciento a las economías latinoamericanas, frente al 10 por ciento de las grandes empresas; respecto a la Europa emergente, a Oriente Medio y a ífrica, las pymes sacan de allí el 23 por ciento de sus resultados, frente al 16 por ciento de las mayores compañías; y en Asia están igualados, con el 17 por ciento para las pymes y 16 por ciento para las grandes. Esto lo desconoce bastante gente, pero en parte es lo que explica la diferencia entre el crecimiento de las pymes y el de los bluechips.