Por... Cira Rodriguez Cíésar
Italia está en un verdadero "estado de guerra" por el elevado nivel de evasión fiscal que perjudica a las finanzas y daña la percepción del país desde el exterior, afirmó hoy el primer ministro, Mario Monti.
En declaraciones a la revista Tempi, aseguró que su ejecutivo librará una batalla a fondo contra la evasión de impuestos, problema que dificulta el correcto desarrollo de la economía.
Monti consideró que la notoriedad pública de la elevada tasa de evasión contribuye a poner en contra de Italia a los países que podrían prestar asistencia financiera, como los del norte de Europa.
El premier italiano aseguró que desde el exterior se piensa que "Italia es un país muy rico, pero el Estado tiene un fortísimo endeudamiento público que quizá mañana necesite ayuda para renovarse, y hay italianos ricos o de clase media que sistemáticamente no pagan los impuestos".
Por esa razón adelantó que su gobierno apuesta por una dura lucha contra la evasión fiscal, con acciones de las autoridades que pudieran ser rechazadas a pesar de calificarlas de preventivas hacia otros ciudadanos.
Monti confirmó que en las próximas semanas el ejecutivo analizará la posible venta de parte del patrimonio inmobiliario del Estado para así reducir el alto endeudamiento público, que cerró 2011 en 120,1 por ciento del Producto Interno Bruto.
Dijo que en la primera etapa de su mandato el objetivo fue la contención del díéficit y de reforma, mientras ahora se realizan acciones que han demostrado a Europa y al resto del mundo la capacidad y voluntad del país de acometer cambios profundos de su estructura.