Tras el golpe de los bajistas en las últimas cinco sesiones (pese a que en Europa resistieron los soportes y que, en Wall Street, el viernes mejoró el aspecto semanal), el cierre mensual debe poner las cosas en su sitio.
Intensa, es la palabra que define a la semana que queda atrás, de aplazamientos en lo político y de renovadas expectativas en torno a la Reserva Federal de EEUU. Desde el punto de vista tíécnico, sin embargo, la sangre no llegó al río. Y no lo hizo, ni en Europa, donde los soportes de las principales referencias cumplieron con su función, ni en EEUU, donde incluso quedó un regusto agradable a cierre semanal.
Con Grecia en el punto de mira durante toda una semana de reuniones entre mandatarios europeos, el resultado volvió a ser el de siempre. Más espera. La canciller Alemana, Angela Merkel quiere tener entre manos el informe que elaborará en septiembre la Troika para tomar decisiones sobre la ayuda al país heleno. Y todo, mientras que íéste pide "un poco de aire", o dicho de otro modo, más tiempo para cumplir con las reformas exigidas.
El otro frente fue la especulación de que en la próxima reunión del BCE, la institución establecerá las reglas del juego para la compra de bonos de países en apuros. Una esperanza que tambiíén se desvaneció el viernes, despuíés de que saltase el rumor de que los chicos de Draghi querrían esperar primero al fallo del Tribunal Constitucional alemán sobre el nuevo fondo de rescate (MEDE).
Y el último capítulo fue el de la Reserva Federal. Si las actas de la última reunión, publicadas esta semana, dejaban entrever que sus miembros son proclives a aprobar otra ronda de estímulos (QE3) a menos que los datos económicos mejoren, Ben Bernanke lo corroboró más tarde. Una carta del presidente de la institución a un miembro del partido republicano que se filtró a los medios dejaba claro que la Fed tiene munición para contraatacar si fuese necesario.
Clave para los próximos días
Con todo este cóctel, el cierre semanal supuso píérdidas del 3,3% para el Ibex 35 (su primera semana a la baja despuíés de cuatro de ganancias) y descensos leves para Wall Street en el conjunto de la semana. La clave para medir la fuerza de los bajistas en los próximos días es clara: "para que haya un deterioro dentro de las posibilidades alcistas a corto plazo que sugieran un escenario correctivo de mayor amplitud, sería necesario que próximos recortes profundicen por debajo de los mínimos vistos el viernes de forma general", señalan los estrategas de Ecotrader.
Agenda de la semana
Y es que esta semana el mercado tiene cita con el cierre mensual, y la agenda viene cargada de citas importantes. En especial, el encuentro anual de banqueros centrales que se celebra en Jackson Hole, y donde se espera que hable Bernanke para dar más pistas sobre esa tercera ronda de estímulos (consulte aquí toda la agenda semanal).
Quien ya lo está celebrando es el euro, que aprovechó la debilidad del dólar esta semana para escalar hasta los 1,25 dólares. Los estrategas de Ecotrader ven margen hasta los 1,26 dólares hasta que los bajistas puedan volver a hacer acto de presencia.