Por... Masiel Fernández Bolaños
El mercado del acero, como tantos otros, tambiíén se encuentra entre los golpeados por la crisis en la Eurozona y la debilidad de la economía mundial.
Aunque en muchas ocasiones ese material es asociado con la dureza y la resistencia, tales propiedades no lo han hecho infalible a la fragilidad del contexto actual.
Tras la caída de junio pasado, la producción global de acero crudo aumentó en julio, en un mercado atento al comportamiento de la demanda, según fuentes especializadas.
El avance fue de dos por ciento a 130 millones de toneladas en comparación con el mismo mes del año anterior.
La Asociación Mundial de Acero reportó que China, el principal productor del orbe, registró el mayor incremento, seguido por Japón y Estados Unidos, mientras que en el conjunto de la Unión Europea se produjo una desaceleración por la debilidad de la demanda y la incertidumbre existente.
La entidad apuntó que el gigante asiático trata de disminuir los niveles de inventario, pues, en medio de la fragilidad de los pedidos, gran parte del material no encuentra compradores en el mercado internacional.
Desde abril último pronosticó que el consumo global de acero se ralentizará este año en medio de las constantes dificultades en la economía.
En dicho entorno, la Comisión Europea informó recientemente que analiza medidas para apoyar a ese sector.
El Ejecutivo Comunitario considera que el acero ha sido uno de los apartados más expuestos durante la actual coyuntura, debido a la competencia internacional y a la baja demanda en el Viejo Continente.
Por ello, incentivar la competitividad a largo plazo es uno de los objetivos priorizados.
EN AMí‰RICA LATINA
La producción de acero crudo alcanzó en Amíérica Latina un volumen de 39,6 millones de toneladas entre enero y julio de este año, el uno por ciento menos que en igual período del 2011.
De acuerdo con la Asociación Latinoamericana del Acero, los países con mayor producción en julio fueron Brasil y Míéxico.
Entretanto, expertos alertan que las grandes siderúrgicas en el nivel mundial están lidiando con una reducción de los pedidos provocada por la prolongada crisis en Europa y cifras menos alentadoras en varias de las principales economías del orbe.
La mayor empresa siderúrgica japonesa y segunda del orbe, Nippon Steel Corp, anticipó una caída del 89 por ciento en sus ganancias durante el primer semestre del año, situación que golpea a la industria automotriz y de la construcción.
Tambiíén la metalúrgica china MaSteel, una de las principales productoras de hierro y acero de China, reportó números rojos durante el primer semestre del año a consecuencia de la caída de precios ocasionada por la floja demanda.
La compañía explicó que los menores importes en materias primas no compensaron las píérdidas causadas por la disminución de precios de los productos de acero.
Como si fuera poco, los analistas consideran que el exceso de oferta continuará afectando a la industria metalúrgica durante el segundo semestre del 2012.
SOBRE SUS APLICACIONES
El acero destaca por su amplia presencia en la vida cotidiana de las personas.
Se puede encontrar en forma de herramientas, utensilios, equipos mecánicos y formando parte de electrodomíésticos, maquinaria en general, en las estructuras de las viviendas y en la gran mayoría de los edificios modernos.
Los fabricantes de medios de transporte de mercancías y los de maquinaria agrícola sobresalen como grandes consumidores de esa aleación de hierro y carbono.
Tambiíén son grandes consumidores las actividades constructoras de índole ferroviario desde la fabricación de infraestructuras hasta las de todo tipo de material rodante.
Además, lo utiliza la industria fabricante de armamento, especialmente la dedicada al armamento pesado, vehículos blindados y acorazados; los grandes astilleros especializados en barcos petroleros y buques cisternas.
Como muchos otros elementos, el acero puede ser reciclado al final de su vida útil.
Los especialistas destacan que muchas estructuras y equipos construidos con ese material se desbaratan, separando los diferentes materiales componentes y originando unos desechos llamados comúnmente chatarra.
Esa chatarra se prensa en bloques, que son reenviados a las acerías para su reutilización.
Así, es reducido el consumo en materias primas y en energía a invertir en la fabricación del acero.
Se estima que la chatarra reciclada cubre el 40 por ciento de las necesidades mundiales de este material