Los futuros europeos vienen con subidas en una semana en la que los mercados esperan consolidar los avances conseguidos gracias al anuncio de que el BCE comprará deuda a los países con problemas.
Aunque la sesión de hoy no cuenta con grandes referencias, todas las miradas están puestas en el miíércoles, el día en el que el Constitucional alemán se pronunciará sobre la legalidad del rescate europeo. Al otro lado del atlántico, el miíércoles y jueves se celebrará la reunión mensual de la Reserva Federal. Los inversores esperan con grandes expectativas el posible anuncio de una nueva ronda de estímulos económicos.
Además, el martes la consultora Oliver Wyman comunicará el resultado de las auditorías realizadas sobre las necesidades de capital de los bancos españoles. Otras importantes citas de la semana, serán las reuniones del Ecofín y el Eurogrupo en Chipre, y la publicación de la propuesta de la Comisión Europea sobre la unión bancaria y nuevos encuentros bilaterales entre los pesos pesados de la Eurozona.
En la preapertura de las bolsas europeas, el Ibex 35 se anota un 0,26%, el Dax sube un 0,66%, el CAC 40 avanza un 0,26%, el MIB italiano sube un 2,09% y el Eurostoxx 50 suma un 0,54%. En España, la prima de riesgo consiguió bajar 140 puntos en una semana para situarse en los 411 puntos básicos. Mientras que el euro cotiza por encima de los 1,27 dólares.
Las bolsas asiáticas, por su parte, cerraron la sesión en terreno negativo. En la bolsa de Tokio, el Nikkei perdió el 0,02%, despuíés de que el gobierno de Japón revisara a la baja el crecimiento de su PIB del primer trimestre fiscal, que pasó de un 1,4% a un 0,7% a ritmo anual. El Kospi cayó un 0,25% despuíés de que el gobierno haya anunciado que aplicará nuevas medidas de estímulo por 4.000 millones de euros. En China, las exportaciones crecieron un 2,7% en agosto y alcanzaron los 177.970 millones de dólares estadounidenses.
El pasado sábado, se reunieron el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, y el primer ministro italiano, Mario Monti, donde propusieron una cumbre extraordinaria de la Unión Europea para contrarrestar lo que consideran un creciente y peligroso sentimiento antieuropeo. Monti recalcó la idea de esa cumbre de la UE se ha hecho necesaria porque Europa "se encuentra en una fase peligrosa donde el populismo está intentado desintegrarla".