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El poder adquisitivo del salario mínimo de los mexicanos cayó 43,1 por ciento en el último sexenio, con una píérdida acumulada, en 25 años, del 79,11 por ciento, reveló un estudio de la Universidad Nacional Autónoma de Míéxico.
De acuerdo con el Centro de Análisis Multidisciplinario de la Facultad de Economía de la institución docente, para recuperar su capacidad y mantener el incremento promedio de cada año- entre cuatro y cinco por ciento- tendrían que congelarse los precios de diversos productos durante 47 años.
En el reporte, citado por el diario La Jornada, se estableció que en diciembre de 2006 con una percepción mínima era posible adquirir 4,2 kilogramos de huevo. En agosto pasado, el volumen cayó a 1,69, es decir, 2,51 kilogramos menos, un desplome de más del 50 por ciento.
Respecto a la tortilla, en el lapso referido se dejaron de comprar 2,17 kilogramos con el mismo ingreso; con relación al pan la píérdida fue de 16 kilogramos; de frijol, tres kilogramos; de leche, 1,26 litros, y de aceite, 940 mililitros.
En el periodo referido, el precio de la gasolina registró una tendencia al alza. La magna, de consumo mayoritario en el país, aumentó 36,22 por ciento, con impacto directo en las familias, que destinan 24 por ciento de su ingreso mensual al energíético, subrayó la investigación.
Respecto al diíésel, que es utilizado por el transporte de carga, se detectó un incremento, hasta agosto pasado, de 45,24 por ciento.
De acuerdo con el texto, en 1987 las familias mexicanas solo requerían del ingreso de uno de sus integrantes para sostenerse, pero actualmente se requiere que aporten hasta tres miembros.
