La cita de hoy es al otro lado del Atlántico, con la Reserva Federal. La autoridad monetaria de Estados Unidos finaliza hoy su reunión de dos días con una comparecencia de su presidente, Ben Bernanke, en la que podría anunciar un tercer programa de compra masiva de bonos del Tesoro para estimular la economía. Los futuros europeos se mueven poco en la preapertura, con alzas mínimas. El euro supera los 1,29 dólares.
Mario Draghi da paso a su colega estadounidense Ben Bernanke en el foco mediático. Si hace una semana el presidente del BCE era la clave de la operativa de los mercados, hoy la atención cambia de continente y se traslada a la Reserva Federal estadounidense. Alrededor de las 20.30 (hora española) y con los mercados europeos ya cerrados Bernanke dará a conocer las medidas adoptadas en la reunión que se celebra desde ayer en la Fed. Y el mercado es optimista: cerca del 65% de los encuestados por Reuters prevíé que la autoridad monetaria de EE UU anuncie una tercera ronda de compra masiva de deuda pública para estimular la economía (conocida en sus siglas en inglíés como QE3, quantitative easing).
Mientras se produce o no la decisión, los inversores aguardan con cautela. Los futuros de los índices europeos se anotan subidas mínimas (del 0,2%) despuíés de que el Dow Jones estadounidense cerrara ayer sin variación.
El euro, por su parte, prosigue la escalada y ya cotiza por encima de 1,29 dólares. La expectativas de una ronda de estímulo penaliza a la divisa verde: en la práctica la compra de bonos supone una emisión de moneda, frente a las compras anunciadas por el Banco Central Europeo que serán esterilizadas (drenadas) según anunció Mario Draghi.
La prima de riesgo, mientras tanto, queda en el nivel de los 400 puntos, tras caer ayer otros 15 enteros. El visto bueno por parte del Tribunal Constitucional alemán al fondo de rescate permanente y al plan de disciplina fiscal de Merkel fue recibido con entusiasmo y se interpreta como un paso importante en el camino de resolver la crisis de deuda europea.