En unos momentos en que la búsqueda de financiación es uno de los muchos problemas de las empresas españolas, Tubacex anunció ayer el cierre de las negociaciones con una docena de entidades que garantizan a la siderúrgica el acceso a 160 millones a medio y largo plazo.
El segundo fabricante del mundo de tubos sin soldadura en acero inoxidable ha informado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) de que son operaciones relacionadas con la ampliación de vencimientos de líneas de críédito, utilizadas para cubrir la operativa de la empresa de Llodio (ílava), y con la renegociación de críéditos, empleados luego en inversiones en nueva capacidad industrial.
El grupo que preside ílvaro Videgain ha pactado la renovación de líneas de críédito por un importe de 110 millones. La mayoría (80 millones) extiende su cobertura hasta los tres años, frente al plazo anterior de un año. En cuanto a los príéstamos, la corporación vasca ha conseguido 50 millones a pagar en cinco ejercicios, con dos de carencia. Algunos de estos críéditos tenían el vencimiento a un año en su modalidad anterior.
Tubacex ha negociado estas condiciones con 12 entidades, "entre las que se encuentran las más importantes del país", según fuentes de la compañía. Con cada banco y caja ha pactado compromisos distintos, según la cantidad de dinero solicitada y el plazo renegociado.
Para la empresa vasca, las operaciones citadas incrementan "la estabilidad financiera" de Tubacex "en un momento de gran incertidumbre macroeconómica y de escasa liquidez en el mercado de críédito".
Videgain y su equipo diseñan estos días la estrategia de la siderúrgica para el periodo 2013-2018. El plan estará basado en un aumento de la fabricación de productos de valor añadido y en el incremento del negocio en los mercados emergentes, sin descartar la implantación en esos países, como India. De momento, este año duplicará la capacidad de producción de su planta de Amurrio (ílava) de los tubos para exploración OCTG.
Mejora de resultados este ejercicio
Los responsables del grupo de Llodio prevíén "mejorar sustancialmente" los resultados del ejercicio anterior, gracias "a la incorporación de nuevos productos" en su catálogo comercial. Otra clave es la recuperación de las exportaciones, animadas por el alto precio de los carburantes y del gas, lo que anima a realizar extracciones, aun en condiciones complicadas en cuanto a la orografía y la climatología, en cualquier parte del mundo. Tubacex ganó 3,66 millones el año pasado, despuíés de dos ejercicios en píérdidas, motivadas por el parón que la crisis causó en casi toda la industria.