"Desorden económico y social que dejará huella"
elEconomista/ New York
Dylan Grice, analista de Sociíétíé Gíéníérale, asegura en su último informe estar "más preocupado que nunca" por las nubes que se acumulan en el horizonte. De hecho, el especialista habla de la llegada de un "Gran Desorden" económico similar a los que han definido íépocas históricas y marcado a generaciones enteras.
Este "Gran Desorden" está encabezado por la flexibilización monetaria que los bancos centrales de todo el mundo están llevando a cabo. Grice apunta que, como ha demostrado la historia, la degradación de la moneda conduce a una "degradación social", es decir, un aumento del desorden público provocada por una rúptura a gran escala de la confianza.
Según el analista del banco galo, en Estados Unidos y Europa ya se aprecian señales de esta complicada situación. "El 99% de la población culpa al 1%, el 1% culpa al 47%, el sector privado culpa al sector público y viceversa, los jóvenes culpan a los adultos, los ricos a los pobre... Pero nadie cuestiona algunas ideas del gobierno o los bancos centrales", indica.
Grice pone de manifiesto que hasta ahora hemos vivido "lo que podría considerarse la más grande inflación crediticia de la historia..., una hiperinflación de críédito". Según íél, esta "hiperinflación de críédito", sin embargo, "sólo ha servido para enriquecer a los de arriba a costa de los de abajo".
El experto examina algunos ejemplos de la historia donde la degradación de la moneda provocó un colapso total de la estructura social de las comunidades como es el caso del Imperio Romano, el periodo revolucionario en Francia a finales del siglo XVIII y durante la Alemania de Weimar.
En todos los casos, señala Grice, los ciudadanos y se enfrentaron entre sí con moneda devaluada drásticamente que provocó una píérdida total de confianza entre los miembros de la sociedad.