Las calificaciones que las agencias otorgan actualmente a Santander; su filial Banesto; BBVA; CaixaBank y Barclays España son más altas que las del propio Reino de España.
Despuíés de que la pasada semana Standard&Poor's rebajara el ráting de España en dos escalones, hasta “BBB-“, es decir, al borde del bono basura, hay cinco entidades entre las principales del sistema financiero español que tienen mejor calificación que la soberana. En concreto, para S&P, Santander, así como su filial domíéstica Banesto, se merecen una nota de “A-“, tres escalones por encima de España; BBVA y la filial británica de Barclays están en “BBB+†y CaixaBank en “BBBâ€.
Tanto el ráting de España como los de todas estas entidades están en perspectiva negativa, lo que significa que la agencia ve mayores probabilidades de que un próximo cambio de nota sea a la baja que al alza. Además, S&P ya ha comunicado que su decisión sobre España, "puede tener impacto negativo" en las calificaciones de los bancos.
Santander tiene mejor ráting que España tambiíén para la agencia Moody’s, que califica al banco con un “Baa2†y el reino con “Baa3â€. Tambiíén en estos casos, las perspectivas son negativas. De hecho, Moody's está revisando la calificación de España y su próximo movimiento, que colocaría la deuda española en el grado de “no inversión†es esperado para finales de mes.
El pasado junio, la agencia estadounidense recortó en tres escalones su juicio sobre la deuda soberana española e hizo lo propio con la banca, llevando otras doce entidades al nivel de bono basura. En total, hay 22 grupos financieros españoles que, según Moody’s, no merecen la categoría de inversión.
En el caso de Fitch, tanto Santander como BBVA baten la calificación de España, ambas con un “BBB+†frente a “BBBâ€. Y, tambiíén en estos casos, todas las perspectivas son negativas.
Las razones de las agencias
El propio ráting de España, así como la situación macroeconómica del país y la evolución de su mercado inmobiliario, son algunos de los principales argumentos que utilizan las agencias para explicar su desconfianza hacia las entidades financieras españolas. A esto, hay que añadir los activos tóxicos inmobiliarios que las entidades tienen en su balance.
En el caso de Santander y BBVA, de hecho, su ventaja respecto a las demás entidades está en su diversificación geográfica. En ambos casos, España representa menos del 20% del beneficio.
En el caso de CaixaBank, las agencias valoran su fortaleza en España: tras la adquisición de Banca Cívica, la entidad catalana ha recuperado el liderazgo del sistema financiero español, por oficinas y activos. Eso sí, la absorción de Cívica ha provocado que, el pasado agosto, S&P recortara el ráting de CaixaBank. Tambiíén hay que tener en cuenta que su matriz, La Caixa, al que CaixaBank traspasó la mayoría de los activos tóxicos, tiene calificación de bono basura tanto para S&P ("BB+") como para Moody's ("Ba2").