Telefónica tiene intención de llevar a Brasil el modelo de 4G desarrollado en Alemania, primer país donde lanzó estos servicios, disponibles ya en algunas grandes ciudades, de la mano de Nokia Siemens y Huawei. En Brasil, donde ya trabaja con Ericsson y Huawei, el plan es muy ambicioso y pasa por desplegar el 4G en 2013 en las ciudades-sede de la Copa Confederaciones de fútbol.
La dirección de Telefónica tiene claro desde hace tiempo que la compañía debe funcionar de forma integrada. La creación en 2011 de l área de recursos globales fue la prueba al integrar compras y procesos para todo el grupo. Ahora, la operadora parece buscar una colaboración plena entre sus divisiones internacionales en el ámbito de los proyectos de redes.
Así, Telefónica quiere importar a Brasil el modelo de implantación de la telefonía móvil 4G desarrollado en Alemania, primer país en el que la operadora lanzó estos servicios, tal y como indicaron los responsables de la filial brasileña en el encuentro con inversores celebrado la pasada semana.
En Alemania, tras adjudicarse el espectro en 2010, Telefónica empezó a desplegar el 4G, con tecnología LTE, en zonas sin cobertura previa, o rurales en 2011, según se exigía en la licitación. Posteriormente, la operadora inició el despliegue de LTE_de manera progresiva en zonas urbanas. Telefónica, que cuenta como proveedores de red con Nokia Siemens Networks y la china Huawei, tiene previsto alcanzar una cobertura del 15% de la población a final de año.
Telefónica, que ya ha incluido el LTE en algunas de sus tarifas, desplegó primero el LTE en las ciudades de Nuremberg y Dresden, para pasar luego a Munich y Leipzig.
Apuesta brasileña
Ahora, en Brasil, la operadora ya está trabajando con intensidad. En junio de este año, Telefónica se adjudicó las bandas de espectro para 4G en la subasta celebrada por el regulador Anatel con una inversión de 1.050 millones de reales (unos 400 millones de euros).
La empresa, al igual que el resto de operadoras brasileñas, deberá ofrecer servicios de 4G en abril de 2013 en las ciudades-sede de la Copa Confederaciones de fútbol (Belo Horizonte, Brasilia, Fortaleza, Recife, Río de Janeiro y Salvador), que se celebrará en junio. En 2014, el servicio deberá estar disponible en las ciudades sede del Mundial de fútbol. Con este calendario, Telefónica ha seleccionado a Ericsson para hacer la provisión e implementación de la red 4G/LTE en las regiones del norte y el centro-oeste de Brasil, junto a los estados de Sao Paulo, Minas Gerais y Bahía.
Asimismo, para completar la cobertura de las ciudades-sede de la citada Copa Confederación, Telefónica ha elegido como proveedor a Huawei, con el que ya trabaja en el 4G de Alemania. Para otras zonas geográficas, la operadora está en la fase final del proceso de selección de los socios proveedores.
La licencia obtenida por Telefónica es de carácter nacional para implantar 4G en todo el país a travíés de la banda de 2,5 GHz, aunque tiene autorizaciones para usar otras frecuencias de la banda de 450MHz que permitan extender la cobertura a zonas rurales en estados como Minas Gerais o Sao Paulo. En esta línea, la operadora comunicó la pasada semana que ha llegado a un acuerdo con la compañía nórdica AINMT para analizar la posibilidad de construir una red complementaria de LTE para la banda rural de 450 MHz.
Lo cierto es que Brasil es un mercado fundamental para Telefónica. En los nueve primeros meses del año aportó el 22% de los ingresos del grupo. Un país en el que compite con grupos fuertes como Amíérica Móvil, Oi y TIM. Con este peso, el despliegue del 4G, clave para los negocios del internet móvil, gana relevancia. Telefónica, en cualquier caso, va a invertir en Brasil cerca de 19.300 millones de reales (unos 7.400 millones de euros) entre 2012 y 2014. Un reto.
Una tecnología de red más sostenible
Telefónica aprovechó la celebración de la edición de 2012 de Futurecom hace pocas semanas para presentar una solución más sostenible en la instalación de las estaciones radio base para el 4G y para la ampliación de las redes móviles actuales.
Según explica la empresa, las antenas tienen un metro de altura y bajo impacto visual. Asimismo, se colocan en los laterales de los postes de iluminación. El resto de equipamiento se coloca en cajas subterráneas de fibra de vidrio que protegen del agua y otros elementos, además de impedir cualquier tipo de impacto en el subsuelo.
Esta solución ha sido desarrollada por la propia Telefónica Brasil y será implantada en más de 500 postes de la empresa ya existentes durante 2013. La empresa insiste en que la intención es evitar la construcción de nuevas torres de telefonía móvil.