Vodafone España tiene intención de presentar un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que afectaría a unos 1.000 trabajadores, lo que supone un 25% de la platilla del grupo en el país.
Según han informado fuentes de los sindicatos a Europa Press, la compañía pretende, incluso, presentar este ERE ante el Ministerio de Trabajo la próxima semana. La actual platilla de Vodafone en España ronda los 4.300 trabajadores.
Vodafone ya ha explicado a los sindicatos en otras ocasiones la preocupación por la caída de ingresos que está afectando a la filial española del grupo, así como al conjunto del sector.
Fuentes de la compañía consultadas por Europa Press no han querido realizar ningún comentario al respecto.
En marzo, Vodafone España y los sindicatos alcanzaron un acuerdo para firmar un nuevo convenio colectivo, que contemplaba un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) temporal de dos semanas de duración en el año fiscal 2012-2013, correspondiente al periodo del 1 de abril de 2012 al 31 de marzo de 2013.
Las partes negociadoras acordaron además la reducción en un 10% del sueldo variable -ligado a la consecución de unos objetivos por parte de la empresa- correspondiente al año fiscal 2012-2013.
Asimismo, la compañía que preside Francisco Román denunció a finales del pasado año el convenio colectivo vigente en la compañía, descartando así una prórroga del mismo para este ejercicio, lo que hacía pensar a los sindicatos en la posibilidad de que se produjeran rebajas salariales o despidos.
La compañía explicó en ese momento que la denuncia del convenio no prejuzga una actuación por su parte, sino que simplemente se pretendía añadir libertad con el fin de poder llevar a cabo cualquier tipo de decisión para adaptarse a las actuales circunstancias.
De acuerdo con los últimos datos reportados por la compañía, los ingresos por servicios de la filial española de Vodafone en el primer semestre de su ejercicio fiscal, que comprende del 1 de abril al 30 de septiembre, han caído un 11%, hasta los 2.319 millones de euros, debido a un descenso de los precios y a un menor uso del móvil por la crisis económica.