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EL viceministro argentino de Economía, Hernán Lorenzino, desestimó hoy aquí la posibilidad de que el país entre en crisis, aunque reconoció como preocupante "que de afuera no va a llegar nada positivo".
Europa no arranca y no va a arrancar. Estados Unidos viene a los tumbos y Brasil no ha crecido en la medida de las expectativas que teníamos, explicó el alto funcionario en declaraciones al diario Tiempo Argentino, en las cuales reiteró que en el caso de esta nación la base económica está.
Lorenzino destacó el hecho que durante la crisis internacional no se han perdido empleos, la cosecha es buena, no tenemos el problema de divisas -que es de donde podrían venir las crisis-, el díéficit energíético es el previsto y los pagos de deuda son bajos.
Acerca de la batalla judicial que se libra contra los llamados fondos buitre ante la Cámara de Apelaciones de Nueva York, refirió que si íésta admite y valida la propuesta de pago que el país deberá presentar antes del 29 de marzo, los especuladores tendrán que reconocer que Argentina tenía razón.
El viceministro catalogó de "extremadamente exitosa" la forma en que se realizó la reestructuración de la deuda para la salida del default, e insistió en que ahora están batallando contra "una disfuncionalidad del sistema".
Las dificultades en la reestructuración de la deuda se presenta no porque el país lo hiciera mal o dejara de hacer algo; el problema es que tiene que lidiar con aquellos que no siguen ninguna lógica del sistema, pues su única razón es la especulación, indicó.
Aseguró además que Argentina presentará antes del 29 de marzo un documento donde va a explicitar las características del Canje 2010. Y despuíés, la Cámara (neoyorquina) "fallará cuando tenga que fallar, no tiene un plazo".