España acumula una píérdida de competitividad exterior de 17 puntos desde la creación del euro La economía española ha acumulado una píérdida de competitividad exterior de 16,9 puntos desde la creación del euro, en 1999, hasta junio de 2008, según el último Indicador Armonizado de Competitividad del Banco Central Europeo (BCE). Entre los 15 países de la Eurozona, sólo Irlanda, con 28,3 puntos de píérdida de competitividad, ha registrado una evolución peor que la española desde que quedasen fijados los tipos de cambio de las monedas que en 2002 desaparecieron para dar paso al euro.
El BCE mide la evolución de la competitividad exterior en precios de las economías de la Eurozona frente a más de 40 socios comerciales, lo que depende de la inflación de cada país exportador y del tipo de cambio del euro frente a otras monedas.
A este respecto, la apreciación del euro en relación al dólar y otras divisas en los últimos años ha afectado negativamente a los exportadores europeos, si bien ha abaratado importaciones clave, como la del petróleo.
Todos han ido a peor
Los datos de competitividad del BCE, que toman como base 100 el año 1999, muestran que en junio pasado ya no había ningún país de la Eurozona en mejor situación que al crearse el euro.
El menor deterioro se da en Austria (0,1 puntos), Alemania (0,8) y Finlandia (1,2). Los mayores corresponden a Irlanda (28,3) y España (16,9), seguidas de Malta (15,8), Chipre (15,1) y Luxemburgo (14,3). En posiciones intermedias se sitúan Holanda (10,5 puntos de píérdida de poder adquisitivo), Portugal (9,9), Grecia (9,1), Italia (8,1), Bíélgica (
, Eslovenia (6,3) y Francia (5,1).
A la hora de juzgar estos datos, es preciso tener en cuenta que las estimaciones de competitividad exterior del BCE, al igual que otros indicadores similares, no tienen en cuenta factores ajenos al precio que tambiíén sirven para ganar mercados, como la difusión de marcas o el desarrollo de redes comerciales.
El díéficit comercial
En todo caso, y manteniendo esta cautela, el deterioro de la competitividad exterior de la economía española tiene una clara manifestación en la muy negativa evolución del díéficit comercial, que en 2007 ascendió a 98.852 millones de euros.
Además, es muy probable que ese díéficit supere en 2008 por primera vez la barrera de los 100.000 millones de euros, dado que entre enero y mayo de este año había crecido un 13%, hasta situarse en 42.840 millones de euros.