No suele ser norma de los tres miembros del actual Comitíé de Competición entrar a enjuiciar o valorar los tíérminos o expresiones que los arbitros recogen en sus actas arbitrales. A priori no deberían hacerlo tampoco cuando este miercoles deban analizar en su primera reunión del 2014 las palabras las palabras que Iglesias Villanueva recoge en su acta arbitral para justificar la expulsión del tíécnico del Espanyol, Javier Aguirre. Textualmente se debió a que el entrenador dijo "eso es amarilla, hijo de puta", motivando la expulsión inmediata por parte del árbitro gallego.
Atendiendo al código disciplinario actual, tal y como recoge el artículo 94, la expresión utilizada por Javier Aguirre se considera como insulto, ofensa verbal o actitud injuriosa hacia el colegiado del partido.
Se trata de una sanción grave que supone un castigo mínimo de cuatro partidos para el tíécnico mexicano del equipo perico. De ser así, y dado que la cualificación de la misma, Javier Aguirre empezaría a cumplir la sanción hoy mismo en el compromiso copero ante el Alcorcón.
Además le afectaría al partido del próximo fin de semana ante el Real Madrid, la vuelta de la Copa del Rey y la siguiente jornada liguera ante el Celta. Existen precedentes que indican que insultos o menosprecios similares han sido castigados duramente por el organo disciplinario.
La temporada pasada fueron duramente sancionados Coentrao, Sergio Ramos o el espanyolista Sergio García por insultos o tíérminos ofensivos a los arbitros. El caso más similar sucedió con Coentrao, sancionado con los cuatro encuentros al llamar "hijo de puta" a Perez Lasa en el compromiso de la temporada pasada entre Real Madrid y Getafe.
Puede darse el caso que el órgano disciplinario de la Federación, bien porque entienda las características singulares de la expresión del mexicano, bien las alegaciones que presente el club, considere la expresión de Javier Aguirre sólo como un menosprecio hacia Iglesias Villanueva.
Sólo en ese caso y acogiendose al articulo 117, podría ser una sanción mínima de dos partidos para el tíécnico del Espanyol. Además, dado el carácter leve de la misma, podría sentarse esta noche en el Estadio de Santo Domingo de Alcorcón y la cumpliría íntegramente en liga. En las dos visitas siguientes al Estadio de Cornella de Real Madrid y Celta de Vigo.
Existe un precedente esta temporada con el jugador del Athletic, Aritz Aduriz, quien fue sancionado con dos partidos al referirse a Fernandez Borbalán en los siguientes tíérminos: "Es una puta verguenza que me expulses por esto". Entonces el Comitíé lo consideró como menosprecio.
El Espanyol presenta alegaciones
El Espanyol ha decidido presentar alegaciones ante el Comitíé de Competición a la expulsión de Javier Aguirre el pasado domingo en El Sadar. El acta del partido recoge que el tíécnico mexicano no pudo terminar el encuentro en el banquillo por espetarle a Iglesias Villanueva "eso es amarilla, hijo de puta". El club manifiesta en el escrito que en ningún caso quiso dirigirse al árbitro de forma despectiva y que no tuvo ninguna intención de ser injurioso. El Espanyol busca minimizar al máximo una sanción que puede ir de dos a cuatro encuentros.
En cambio, la entidad catalana no ha presentado alegaciones a la cartulina amarilla que vio Sergio García. Por lo tanto, el ariete se perderá el encuentro del domingo frente al Real Madrid por acumulación de tarjetas.