Bloomberg
El Gobierno estadounidense quiere detener el crecimiento de la maquinaria de alta gama y la industria aeroespacial de la industria china.
Estados Unidos atacará la estrategia del presidente Xi Jinping para convertir a China en líder mundial en las industrias de alta tecnología del futuro.
Después de aplicar aranceles a industrias del siglo XX como el acero, el presidente estadounidense, Donald Trump, ahora tiene en mente 10 industrias estratégicas que Beijing pretende dominar en este siglo.
Las medidas se podrían anunciar esta semana en sectores básicos del plan ‘Made in China 2025’ para impulsar la maquinaria de alta gama, la industria aeroespacial, los vehículos que funcionan a nuevas energías y la biotecnología.
"Estas son cosas en las que si China domina el mundo, es malo para Estados Unidos", explicó el representante de Comercio del país, Robert Lighthizer, a un comité del Senado este mes.
Estados Unidos ahora ve a China como un rival estratégico y la imposición de tales restricciones marcaría un cambio concreto en sus políticas para contener el ascenso del país asiático en las industrias avanzadas.
"Que apunten contra ’Made in China 2025’ le importa mucho más a China que los aranceles al acero o las lavadoras", dijo Louis Kuijs, economista jefe para Asia en Oxford Economics en Hong Kong, que anteriormente trabajó para el Banco Mundial en China.
"Se trata del futuro e impacta en una de las ambiciones clave que China se ha fijado. Aumentaría la probabilidad de una fricción grave".
Industrias clave
Las medidas contra industrias clave del futuro abordarían más directamente las quejas de las empresas estadounidenses que realizan negocios en China.
Éstas han argumentado durante mucho tiempo que ese país usa una variedad de tácticas para obligarlas a transferir propiedad intelectual, y que las entidades chinas se dedican al robo generalizado de secretos comerciales de Estados Unidos.
Luego de una investigación sobre las prácticas de propiedad intelectual chinas, el representante de Comercio dice que Estados Unidos "enfrentará a China por sus prácticas estatales y de distorsión del mercado" en estas áreas.
El Gobierno de Trump está amenazando con aranceles específicos del 25 por ciento sobre 50 mil millones de dólares en importaciones chinas para compensar el daño causado a la economía estadounidense por las políticas de China, explicó Lighthizer. Los detalles pueden llegar tan pronto como esta semana.
China ya terminó con el dominio de Japón en las exportaciones de alta tecnología de Asia en 2014, según el Banco Asiático de Desarrollo, y representó el 44 por ciento de las exportaciones de productos de alta tecnología tales como instrumentos médicos, aviones y equipos de telecomunicaciones ese año, frente al 9.4 por ciento en 2000.
Aunque en la mayoría de los sectores las tecnologías chinas de inteligencia artificial (IA) aún están rezagadas, los investigadores chinos se han convertido en una fuerza global que no puede ignorarse, según un informe del año pasado que elaboró LinkedIn.
Las compañías extranjeras temen no poder competir con las empresas chinas en inteligencia artificial y fabricación avanzada porque estas son respaldadas por enormes inversiones y subsidios estatales.
China tenía 592 compañías de IA en julio del año pasado y una inversión industrial de 63 mil 500 millones de yuanes (10 mil 200 millones de dólares), ubicándose en segundo lugar respecto de Estados Unidos en ambas medidas, detalló en febrero la edición del periódico oficial People’s Daily en el extranjero, citando estadísticas anónimas.
La producción de la industria está destinada a aumentar a 150 mil millones de yuanes para 2020 y a 1 billón de yuanes para 2030, mencionó el comunicado del Consejo de Estado. CCID Consulting, con sede en Beijing, estima que la producción de la industria fue de 70 mil millones de yuanes el año pasado.
