Las naciones del G-7 están dando un gran impulso a Covax, el esfuerzo global para financiar las vacunas en los países de bajos ingresos, lo que indica que el impulso puede estar aumentando hacia un esfuerzo coordinado por parte de las economías avanzadas para abordar la pandemia.
Gran Bretaña anunció que donará la mayoría de las futuras vacunas excedentes a los países más pobres, después de que Francia se comprometiera a enviar el 5% de sus suministros a través de Covax.
Se espera que Estados Unidos anuncie su contribución a Covax en una llamada hoy, según funcionarios no identificados, mientras que un análisis de Bloomberg muestra que el suministro de vacunas del país se duplicará en las próximas semanas y meses.