La primera quincena se cerró con una subida del Ibex 35 hasta los 11.523,50 puntos y ahí se acabaron las alegrías. El paro alcanzó el 19%, cifra prevista por el Gobierno para todo el año, mientras que Economía gastó en tres meses el 70% del Fondo de Contingencia.
El presidente del Eurogrupo, Jean Claude Juncker, da el primer aviso a España, pero el primer susto llegó a las bolsas el viernes 16, tras las dudas sobre Goldman Sachs acusado de fraude. El Ibex se despidió ese día de los 11.500 puntos, un nivel que costará sudor y lágrimas recuperarlo.
La prima de riesgo de España alcanza máximos históricos tras los varapalos de Eurostat y Moody’s a Grecia y el temor de contagio a España.
El sector público, ajeno al díéficit, suma 100.000 empleos en el trimestre y Standard & Poor’s rebaja el ráting de Grecia a bonos basura, y la deuda española hasta AA, con perspectiva negativa.
Así será mayo
Comienza mal y hay que confiar en que no se cumpla el refrán, que lo que mal comienza... Hemos llegado a un punto en el que nadie sabe cuál es el agujero que tiene Grecia y cada cifra que se da es más alta que la anterior. La bolsa española está sufriendo un castigo desproporcionado para los buenos resultados trimestrales de las empresas, pero tal vez acorde con la inoperatividad del Gobierno.
Se hace cuesta arriba pensar que se anuncie un paquete de medidas acordes con la grave situación. Nadie se apretará mucho el cinturón, no sea que se disgusten sindicatos, funcionarios y autonomías, y lo que preocupa ahora es no perder votos.
El castigo a las empresas va a continuar, hasta que los inversores no residentes se den cuenta que pueden comprar euros a 0,50.
