Sólo superado por Bank of America, Wells Fargo, JPMorgan, Citi y HSBC.
La crisis de Lehman y todo lo que vino detrás le permitió cerrar el año 2008 como líder en beneficios y 2009 en la tercera posición del ranking. Un puesto que volverá a repetir en 2010 (se espera que Santander cierre el ejercicio en una tercera posición mundial gracias a los 9.047 millones que obtenga de beneficio neto) y que consolida definitivamente a la entidad entre los bancos que más dinero ganarán en un escenario bancario nuevamente normalizado (no se incluyen los chinos).
Según los datos que recoge FactSet, la entidad presidida por Emilio Botín conseguirá afianzarse como el sexto mayor banco mundial por beneficios en los próximos tres años. En este periodo se espera que amase un resultado acumulado de 34.230 millones de euros. Por delante, sólo una europea, la británica HSBC, que en el mismo periodo se espera que alcance un beneficio acumulado de 38.356 millones de euros.
Pero, ¿a quíé se debe la increible escalada que ha experimentado el banco cántabro teniendo en cuenta que hace sólo diez años ocupaba la 15 posición en el ranking mundial?
Por un lado, está el hecho de que, debido a las restricciones que impuso el Banco de España a las entidades españolas, íéstas fueron unas de las que menos afectadas se vieron por la crisis de las hipotecas subprime. De hecho, mientras que en 2009 bancos tan poderosos como Lloyds, Citigroup o UBS cerraron el ejercicio con píérdidas, todos los españoles despedían el año con ganancias. Por no hablar de que en muchos de ellos tuvieron que intervenir sus respectivos Gobiernos para evitar su quiebra...
Por otro, dicen los expertos que es en momentos de crisis cuando surgen las oportunidades. Y Emilio Botín fue uno de los que llevó esta regla del mercado a buen puerto. Sólo en 2008, año en el que estalló la crisis de las subprime, adquirió los británicos Alliance and Leicester y Bradford&Bingley. Y muchas de estas compras se realizaron en un contexto de pánico hacia todo lo que fuera sector financiero, ya que tuvieron lugar despuíés de la quiebra de Lehman Brothers.
Luego llegaría la adquisición del estadounidense Sovereign, de la que ahora se especula con la posibilidad de que se fusione con la tambiíén norteamericana M&T. Una fusión que, según explican en Banca March, "convertiría a la filial de Santander (SAN.MCSANTANDER
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Además, esa idea internacional ha llevado a la entidad a afianzarse como banco de inversión ya que se ha convertido en miembro liquidador de la Chicago Mercantile Exchange y del ICE Futures con el objetivo, según explica íngel Moreno, director de derivados, listados y custodia del banco, de "ser un proveedor global de servicios y competir por los clientes de fuera de España".
¿Demasiado grande?
La actividad corporativa llevada a cabo por el banco en los últimos años ha hecho, sin embargo, que algunos empiecen a plantearse si no es demasiado ambiciosa. En declaraciones a Bloomberg, John Raymond, analista de CreditSights, afirmaba que "la cuestión ahora es si puede vigilar el riesgo. Cuanto más grande eres, más fácil es no darse cuenta de que algo está fallando en alguna parte de tu imperio".
Sin embargo, es esa estrategia internacional una de las principales ventajas diferenciales que le separan de sus homólogos españoles y tambiíén europeos (BBVA se colocaría en la decimotercera posición). "La estrategia del Santander es mejorar su ratio de depósitos respecto al total de balance. Se ha lanzado a comprar bancos alemanes y polacos en los que hay un atractivo ratio de depósitos frente a príéstamos.
Se ha dado cuenta de que le sale más barato comprar bancos que pagar depósitos extratipados y con esta estrategia consigue mayor diversificación geográfica, rebaja el total de exposición al sector inmobiliario y a buen seguro la tasa de morosidad", afirma Miguel Paz, analista de Unicorp.
Es precisamente la externalización del banco lo que más gusta a los analistas. "Una de las ventajas que ofrece es el mix de negocio que presentan Brasil y Reino Unido, orientado sobre todo a la financiación del consumo. Además, cuenta con una posición de ventaja de cara a futuras adquisiciones y compras", afirman en Renta 4, que en la última revisión de carteras de elEconomista, incluyó las acciones de este banco en sus recomendaciones de compra.
Desde Metagestión tambiíén ven positiva esta diversificación de negocio aunque tienen "ciertas dudas del modelo que quiere implantar en Reino Unido, basado únicamente en fuerza comercial que tanto ha triunfado en España", afirma Leonardo Lara.
España pesa menos
En todo caso, la principal consecuencia de esta externacionalización es que su negocio en España, a diferencia del que tiene fuera de ella, cada vez supone menos porcentaje en su balance. Por ejemplo, mientras que en el año 2000 el negocio español suponía el 48 por ciento de su beneficio atribuido, ahora este porcentaje se ha reducido hasta el 22 por ciento, según los resultados que publicó la entidad en el primer semestre del año. Y esto sólo en una díécada en la que Santander ha conseguido triplicar su beneficio neto. Algo que no ha logrado ninguna de las entidades con mayor capitalización bursátil del mundo.
Mientras, su negocio en Brasil ha pasado de suponer el 10 por ciento de su beneficio total al 22 por ciento. Y eso que en octubre de 2009 llevó a cabo una ampliación de capital que se tradujo en la salida a bolsa del 16 por ciento de su filial brasileña Santander Brasil.
El consenso de analistas que recoge Factset considera que aún no es momento de adquirir acciones del banco ya que ostenta un consejo de mantener sus títulos. Eso sí, ofrece un potencial del 21,34 a doce meses y una rentabilidad por dividendo superior al 6 por ciento.