Por... ERICA WERNER
WASHINGTON -- El presidente estadounidense Barack Obama destacó el sábado en su discurso semanal por radio e internet las inversiones que su gobierno ha hecho en tecnologías para generar energía limpia, que según dijo crean empleos y son esenciales para la seguridad económica y el bienestar ambiental del país.
A un mes de las cruciales elecciones de la mitad de su mandato, Obama tambiíén acusó a la oposición republicana de querer descartar los estímulos a proyectos de este tipo.
"Eso es lo que está en juego en este debate", dijo. "Podemos volver a las políticas energíéticas fallidas que beneficiaron a las compañías petroleras pero debilitaron a nuestro país. Podemos volver a los días en que las industrias prometedoras se establecieron en el extranjero. O podemos intentar crear nuevos empleos en industrias en crecimiento y podemos estimular la innovación y ayudar a volver más competitiva nuestra economía".
Entre otras medidas, la "Promesa a Estados Unidos" que el Partido Republicano divulgó la semana pasada llama a congelar el gasto del paquete de estímulo del año pasado. Este incluía 90.000 millones de dólares para proyectos de energía limpia, desde vehículos elíéctricos a garantías de príéstamos a la energía solar, aunque gran parte del dinero ya está comprometido o fue gastado.
Obama mencionó una planta de energía solar que se comenzará a construir este mes en el desierto de Mojave gracias a los estímulos del gobierno.
"Con proyectos como íéste y otros en todo el país, apostamos a seguir siendo líderes en la nueva economía global", dijo Obama. "Y ponemos a los estadounidenses a trabajar en la producción de energía estadounidense limpia y hecha en casa, que ayudará a reducir nuestra dependencia del petróleo extranjero y a proteger nuestro planeta para las generaciones futuras".
Los republicanos rechazaron las críticas de Obama, al decir que apoyan las inversiones en energía renovable.
Además, en la respuesta radial de la oposición, el líder de la bancada republicana en el Senado Mitch McConnell criticó los gastos del gobierno y acusó a los demócratas de "excederse con la tarjeta de críédito nacional, con un paquete de estímulo fallido y una ley de atención míédica manejada por el gobierno".
McConnell tambiíén criticó a los demócratas por suspender el período de sesiones del Congreso hasta despuíés de las elecciones sin haber extendido los recortes de impuestos de la presidencia de George W. Bush, que expiran en enero.
Obama y los líderes demócratas quieren renovar los recortes sólo para los individuos que ganan menos de 200.000 dólares anuales y las parejas con ingresos de menos de 250.000. Los republicanos y algunos legisladores oficialistas desean tambiíén extender los de la clase alta, lo que le costaría más caro al gobierno.